Castilla y León
El hospital público de Zamora cuenta ya con una unidad de rehabilitación cardíaca
La unidad, de la que se beneficiarán alrededor de un centenar de personas al año, establecerá pautas controladas y supervisadas sobre actividad física recomendable.
La unidad, de la que se beneficiarán alrededor de un centenar de personas al año, establecerá pautas controladas y supervisadas sobre actividad física recomendable.
El Hospital Virgen de la Concha de Zamora cuenta ya con una unidad de rehabilitación cardíaca formada por cardiólogos, médicos rehabilitadores, fisioterapeutas, psicólogos y psiquiatras, que se encargarán de evaluar cómo afronta el paciente su recuperación tras haber sufrido un infarto de miocardio. Así, esta unidad, de la que se beneficiarán alrededor de un centenar de personas al año, establecerá pautas controladas y supervisadas sobre actividad física recomendable.
Zamora es ya la tercera provincia de Castilla y León que dispone de esta unidad de rehabilitación cardíaca en un centro hospitalario público, mientras que Burgos se sumará dentro de poco, ya que actualmente está en fase de implantación. Por su parte, en Valladolid ya se presta este servicio a través de un concierto con un hospital privado.
El consejero de Sanidad, Antonio Sáez Aguado, visitaba ayer esta nueva unidad e inauguraba una zona habilitada en el área de radiodiagnóstico para dar mayor confort y mejorar la tecnología de un servicio que, según destacaba, realiza más de 24.000 estudios al año.
Por otro lado, durante su intervención ante los periodistas, el consejero anunciaba que en los tres últimos meses de este año se va a producir una reducción de la lista de espera quirúrgica, donde el tiempo medio para entrar en quirófano es de noventa días, «y eso a pesar de que en este tiempo ha habido fiestas entre semana y puentes y los profesionales han disfrutado de los días adicionales a libre disposición», decía el consejero. Además, Sáez Aguado ponía como ejemplo al Complejo Asistencial de Zamora, que cuenta con una demora media de 60 días, «muy inferior a la media de Castilla y León y a la del Sistema Nacional de Salud».
Finalmente, aseguraba también que los pacientes más graves son intervenidos antes de 30 días, que el 94 por ciento de los de prioridad dos reciben atención antes del plazo de 90 días y que el cien por cien de los pacientes de prioridad tres son intervenidos antes de 180 días.
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