Castilla y León
El incendio de Fermoselle afecta ya a Salamanca y se extiende a Portugal
Las lluvias contribuyen a apagar el fuego en Gredos mientras el de Encinedo está casi controlado
El incendio que se declaraba el pasado sábado en la localidad zamorana de Fermoselle, a la entrada del Parque Natural de Los Arribes del Duero, afectó durante la jornada de ayer a la provincia de Salamanca también y se extendió rápidamente, avivado por el fuerte viento, a la vecina Portugal. Un fuego intencionado, que según el delegado de la Junta, Alberto de Castro, se ha provocado «para hacer el mayor daño posible», que ha afectado a superficie que es Reserva de la Biosfera, con el problema medioambiental pero también turístico que supone para las poblaciones de la zona.
Al cierre de esta edición, el incendio se mantenía en el nivel dos de peligrosidad y seguían trabajando decenas de efectivos para sofocar un fuego que llegó a tener un frente de llama activo de casi dos kilómetros. También en tierras zamoranas seguía activo otro incendio en Ribadelago, en el Lago de Sanabria, en unos terrenos que son también Reserva de la Biosfera, aunque el nivel de este fuego era del uno ya por la tarde. En la Junta y en la Diputación de Zamora están preocupados por el número de incendios que están azotando a la provincia -530 en lo que llevamos de año y catorce durante este fin de semana pasado-, pero especialmente porque la gran mayoría son intencionados. Por este motivo, ambas instituciones piden la colaboración ciudadana para tratar de dar con los pirómanos y más dureza a la Justicia a la hora de penalizar a los incendiarios.
Además del fuego de Fermoselle que ha llegado a Salamanca y a Portugal, en la provincia salmantina preocupa la situación del término de Sobradillo, donde combaten un fuego originado en Portugal, que en la tarde de ayer amenazó con entrar al municipio.
Un fin de semana que ha sido especialmente intenso también en la sierra de Gredos abulense, donde un incendio obligó a evacuar a los vecinos de Navalosa y Hoyocasero. El fuego, ya controlado, gracias a la ayuda de la lluvia caída en la noche del sábado al domingo, ha dejado un desolador paisaje lunar que tardará en recuperarse.
Finalmente, el incendio de Encinedo, en León, que ha arrasado 8.000 hectáreas, estaba casi controlado aunque decenas de efectivos seguían trabajando refrescando la zona para evitar que se reavivaran las llamas por el viento.
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