Impulso a los acogimientos de menores en las familias

Castilla y León puede presumir de ser la primera región española en regular los derechos y deberes de las familias que acogen en su casa a menores que no pueden estar con sus padres biológicos.

Castilla y León puede presumir de ser la primera región española en regular los derechos y deberes de las familias que acogen en su casa a menores que no pueden estar con sus padres biológicos.

Y es que hoy entre en vigor el Estatuto de los Acogedores Familiares con el objetivo de facilitar la labor de estas personas en la atención que dispensan a los menores a los que abren las puertas de su hogar y de su vida para darles el cariño y el afecto del que carecen. Pero, también, este Estatuto pretende animar a que nuevas familias de Castilla y León se lancen a una aventura que, como ayer explicaba Nieves Jiménez, presidenta de la Asociación de Familias Acogedoras de Salamanca, es una experiencia «única e irrepetible» que invita a probar y sentir.

«Es un sufrimiento feliz», señalaba esta mujer, que tiene tres hijos de 22, 20 y 17 años, pero que en los últimos años ha acogido en su hogar a cuatro menores. Para Nieves, no hay mayor satisfacción en esta vida que le ha tocado vivir que poder contribuir a que el niño que acogen en su casa «vuela alto y hacia un mundo mejor».

En el estatuto se detallan los tipos de acogimiento existentes (el de la familia extensa, que es cuando un miembro de la propia familia del menor se hace cargo de él; o ajena, cuando una familia que sin parentesco alguno se encarga de cuidarlo por voluntad propia hasta que pueda regresar con sus padres biológicos o sean adoptados), así como los apoyos y ayudas con las que cuentan para poder llevar a cabo esta tarea sin problemas. También se incluyen los deberes que tiene la familia para con el menor, como por ejemplo integrarle en la vida de todos los miembros de la casa o respetar su confidencialidad.

Los únicos requisitos legales que deben tener las familias que quieran acoger es que no tengan antecedentes penales. Pero, sobre todo, y como decía José Varela, presidente de Cruz Roja, «que tengan interés, se impliquen y sean responsables».

La consejera de Familia, Alicia García, presentaba la nueva campaña que se pone en marcha bajo el lema «Todos los niños quieren una familia para ser felices. Acoge y comparte su felicidad», para seguir sensibilizando a las familias de la necesidad existente.

En concreto, García recordaba que a pesar de los 961 acogimientos de niños registrados el pasado año, 485 en familias ajenas (un 6,5 por ciento más que en 2015), aún quedan 67 menores, sobre todo mayores de 7 años, con necesidades especiales y grupos de hermanos, esperando un hogar temporal.