Prisión sin fianza para la mujer de Fabero que presentó una denuncia falsa por malos tratos

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 5 de la localidad leonesa de Ponferrada decretó ayer por la tarde el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza para V.G.G., la mujer que acusó a su expareja de haberla secuestrado y maltratado echándola pegamento en la vagina después de que haya reconocido los hechos.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 5 de la localidad leonesa de Ponferrada decretó ayer por la tarde el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza para V.G.G., la mujer que acusó a su expareja de haberla secuestrado y maltratado echándola pegamento en la vagina después de que haya reconocido los hechos.

A la mujer se le acusa de los delitos de denuncia falsa, simulación de delito y abandono de familia, según informaba el Tribunal Superior e Justicia de Castilla y León (TSJCyL). La Guardia Civil llevó a cabo en la mañana de ayer un registro en la vivienda de la mujer acusada. Al respecto, las grabaciones de las cámaras de videovigilancia de un bazar cercano al domicilio de la acusada fueron claves para la detención de la mujer, según confirmaron fuentes cercanas a la investigación. En ellas, V.G.G. aparecería comprando los objetos que utilizó para simular su secuestro y la agresión que denunció el pasado martes en Bembibre.

Por su parte, el supuesto cómplice de la mujer, F.V.A. ha quedado en libertad con obligación de comparecer en el Juzgado el día uno de cada mes y será investigado por simulación de delito. La mujer denunció que la pasada semana había sido secuestrada por su expareja y que le había echado pegamento y líquido abrasivo en la vagina.

Inicialmente, el titular del juzgado de instrucción número 5 de Ponferrada, Ignacio Candal, envió a prisión a su expareja, I.R.G. de 35 años, si bien ayer lo dejó en libertad antes los indicios de que se trataba de una simulación de delito. Pero el juzgado tiene pruebas de que los elementos utilizados para simular el secuestro fueron comprados por ella, por lo que está imputada por los delitos de denuncia falsa y simulación de delito. La mujer, según el TSJCyL reconocía los hechos en su declaración ante el juez.