Rivera promete reducir un 60% el IRPF en las zonas despobladas

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, abrió ayer en Burgos el ciclo de encuentros «Tus candidatos a fondo», organizado por el Grupo Promecal. Un foro de debate conducido por el director de la Agencia Ical, Luis Miguel Torres, y la delegada en la capital burgalesa, Mariluz Martínez, en el que el aspirante del partido naranja a presidir el Gobierno de España habló no solo de Cataluña y el desafío secesionista, sino también y mucho de Castilla y León, de Silvia Clemente y polémicas primarias.

También se refirió a posibles pactos postelectorales e incluso lanzó alguna propuesta frente a la despoblación, principal problema de la Comunidad, que desmenuzará en unos días cuando presente el Plan que su partido ha elaborado, con modelo de financiación incluido, para hacer frente a este problema endémico en nuestro país, y que actuará principalmente en aquellos municipios con menos de 5.000 habitantes o con una densidad de población muy baja. Entre ellas, Rivera se comprometió si es presidente a aplicar una reducción del 60 por ciento en el Impuesto de la Renta a las Personas Físicas (IRPF) que habiten en las zonas más despobladas. Según explicó el líder naranja, la idea es que estos territorios tengan un tratamiento fiscal similar al que existe en Canarias, Ceuta y Melilla, y con especial atención también a los emprendedores que quieran desarrollar su negocio en las poblaciones rurales.

Rivera recuperó el rechazo de su partido a las diputaciones. «No son la solución, porque enchufar a la gente nunca lo es», dijo el candidato de Ciudadanos a la Presidencia del Gobierno, a la vez que defendió un Consejo de Alcaldes para mancomunar servicios, y preguntó PP y PSOE para qué han servido sus recetas en lugares como Castilla y León, que ha perdido 150.000 habitantes en los últimos años. Respecto a las polémicas primarias llevadas a cabo en la Comunidad para elegir al candidato a la Junta, Rivera aseguró que ya está solventado, se remitió al Comité de Garantías sobre el posible traslado del suceso a la Justicia, y reivindicó el procedimiento llevado a cabo en su partido frente al dedazo del PP de Casado y la «escabechina» de las bases llevada a cabo por Pedro Sánchez en el PSOE.

Sobre la situación de la ex presidenta de las Cortes, que se ha quedado fuera también de las listas al Congreso y al Senado, Rivera no descartó tampoco contar con ella en el futuro. También tuvo palabras de apoyo para el candidato ganador, Francisco Igea, con quien se fundió en un abrazo a su llegada al foto, y de quien dijo que va a apoyar «porque le quiere ver de presidente de Castilla y León.

Y preguntado por un posible pacto con el PSOE de Tudanca para acabar con treinta años de Gobierno popular en Castilla y León, dijo que, a día de hoy, ve complicado cualquier acuerdo con los socialistas también en comunidades y ayuntamientos, debido al acercamiento de Pedro Sánchez a los independentistas, así como al «sectarismo» de sus políticas, que extendió a ciudades como Valladolid, donde gobierna Óscar Puente, sanchista reconocido, e incluso a un posible Gobierno de Tudanca, que apoyó también a Sánchez.

Igea, por su parte, presentó a Rivera en el foro y defendió su liderazgo «porque escucha y cree en el mérito de las personas y en la libertad».