Una Orquesta para dar a conocer el talento de los jóvenes burgaleses

En 2013, cuatro jóvenes músicos burgaleses, Pedro Bartolomé, Ignacio Germán González Yagüe, Jorge Rodríguez y Luis Ángel Lozano, decidían poner en marcha una Joven Orquesta Sinfónica en el que tuvieran cabida el mayor número posible de instrumentistas de la ciudad. Arranca con 80 músicos y, a día de hoy, la cifra supera el centenar, donde se da cabida a estudiantes de grado profesional del Conservatorio Rafel Frühbeck de Burgos, alumnos de música de toda la provincia y de otras limítrofes, con actuaciones en las que han colaborado con otras asociaciones culturales de la ciudad.

«Lo que pretendemos es que los chavales puedan tocar fuera otras cosas ajenas a lo que hacen en el Conservatorio», señala a LA RAZÓN, Ignacio González Yagüe, que también es integrante de la Orquesta, con varios objetivos al frente: por un lado fomentar la capacidad de los jóvenes para que puedan en un futuro ofrecer conciertos solistas y el de acercar la música clásica a los menores burgaleses, como medio de divulgación cultural.

Y el funcionamiento de la Orquesta Sinfónica es muy acorde a los nuevos tiempos que estamos viviendo, donde las redes sociales toman protagonismo. «La gente que quiere formar parte nos envía por correo su currículo y una interpretación y la junta directiva decide después». Un mismo funcionamiento para los ensayos, ya que se manda por email las partituras a sus integrantes y una semana antes del concierto, se producen los ensayos. «Trabajamos por concentración», asegura González Yagüe, debido a los compromisos de trabajo, estudios o de vivir fuera de la capital, de los jóvenes que conforman esta Orquesta Sinfónica.

Son cinco los conciertos que han ofrecido hasta la fecha, pero la idea para el próximo curso es ofrecer tres, uno en septiembre, otro en Navidades y un último en Semana Santa, con la posibilidad de hacer un intercambio en verano como el que han hecho recientemente con la Orquesta de Manises.

E involucrar a la sociedad burgalesa es también otro de sus rectos. Por ello, se ha colaborado con el Orfeón Burgalés y el Schola Cantorum o los coros Interludio o Vadillo, además de estrenar nuevas obras de compositores o afincados en la ciudad, como es el caso de Javier Centeno.

A ello hay que añadir, la realización de talleres y cursos para los miembros de la orquesta para completar su formación y para enriquecer aún más los conocimientos de sus integrantes.

Una formación orquestal que se encuentra dirigida por Pedro Bartolomé Arce, con una edad media de20 años, aunque hay integrantes con apenas 15 años de edad y de vez en cuando echan mano de alguien más mayor, por que «tenemos más demanda de viento que de cuerda», señala González Yagüe.