Cataluña formará a los profesores para combatir el radicalismo desde las aulas

El nuevo curso escolar arranca el día 12 con 1.562.780 alumnos y 5.514 docentes más. Los directores ganan libertad para elegir al maestro que más se adapte a su proyecto.

Hayan ido de vacaciones al pueblo de los abuelos, a un país extranjero o se hayan quedado en la ciudad este verano, todos los alumnos que el próximo día 12 empiecen el curso escolar comparten una misma vivencia: los atentados del 17 de agosto. Da igual que estuvieran en Barcelona, Cambrils o Azpeitia, los sentimientos que comparten son los mismos: incomprensión, impotencia, tristeza y rabia. Para afrontar un retorno a las aulas inusual, el departamento de Enseñanza con la ayuda de los Mossos d’Esquadra ha preparado un material especial que ya está en manos de los docentes. Además, ayer, en el presentación del curso escolar 2017-18, la nueva consellera de Enseñanza, Clara Ponsatí, avanzó que los profesores de los centros que lo reclamen, ya sean públicos o concertados, recibirán formación específica para afrontar la radicalización islamista desde la escuela.

Los directores de todos los centros públicos y concertados de Cataluña recibieron ya un curso de formación sobre yihadismo. Y tras los atentados de Barcelona y Cambrils, la idea es extender esta formación a los maestros. Además, se trabaja en la revisión del protocolo de detección de casos de radicalización islamista. La máxima es que la educación es la mejor arma para combatir el terror, pese a que en el caso de Ripoll, los chavales estaban integrados, habían recibido cursos de formación, incluso algunos trabajaban. El ascensor social había funcionado. El próximo lunes, en la junta de directores, el secretario de Políticas Educativas, Joan Mateo, avanzó que se estudiará cómo abordar el yihadismo en las aulas. Porque aunque la escuela catalana ha hecho mucho recorrido en clave de progreso, cohesión e integración, como dijo la misma consellera, «también queda trabajo por mejorar».

Una proppuesta del Gobierno de Felipe González que no se aplica es enseñar el Islam en los colegios. En el curso 2016-17 hubo mil peticiones para estudiar esta religión, aunque de familias dispersas, y no se materializó porque tampoco había demandas de las comunidades musulmanas.

Al margen del altibajo de los atentados de este verano, el nuevo curso escolar arranca con novedades. Habrá más alumnos, 2.700 más, en total 1.562.780. Sobre todo hay más estudiantes de Educación Secundaria. Se abren 15 nuevos centros, aunque once de los cuales lo harán en barracones, mientras de acaban de construir las instalaciones. También hay más profesores, 5.514 más, esto es un 7,1 % más. Lo más destacado es que los directores ganan autonomía a la hora de fichar a su equipo. Dentro de unos márgenes, podrán elegir el perfil del docente que se ajuste más a su proyecto educativo sin tener que respetar el orden de la lista. Igual que sucede en una empresa, podrán entrevistar al candidato y elegir. En total, hay 4.456 plazas perfiladas, un 30 por ciento más que el curso anterior, aunque representan el 5 por ciento. Las plazas las publica la conselleria.