CiU y ERC no aceptan un déficit por debajo del 2,1 por ciento

BARCELONA-Aunque el ministro de Hacienda se mostrará el sábado conciliador y dispuesto a negociar un déficit para Cataluña de hasta un 2 por ciento, el gesto no basta a CiU, que mantiene que el objetivo no puede bajar del 2,1 por ciento si se quiere evitar que el Estado de Bienestar se tambalee. El secretario de organización de CDC, Josep Rull, alegó ayer que la cifra que la Generalitat mantiene sobre la mesa es la del 2,1 por ciento del PIB, porque no está dispuesta a asumir el «altísimo nivel de sufrimiento» por el que tendrían que pasar los catalana con un objetivo menor y sus consecuentes recortes. Tanto CiU como ERC siguen contemplando la posibilidad de prorrogar los presupuestos, algo que los partidos de la oposición no entienden. Desde el PP, Enric Millo replicó que el debate de las décimas es una «cortina de humo» que esconde la incapacidad del Govern de elaborar y aprobar unos presupuestos. En nombre del PSC, Jaume Collboni volvió a incidir en que renunciar a los presupuestos es renunciar a gobernar, mientras que el líder de ICV, Joan Herrera, denunció que prorrogar las cuentas implica trabajar con un techo de déficit del 0,7 por ciento y unos recortes de 4.400 millones (cada décima representa 200 millones). Pero el diputado de ERC en el Congreso Alfred Bosch respondió que hay que ser firme, aguantar y prolongar los presupuestos, porque aceptar un déficit inferior a un tercio del total implicaría pagar impuestos como los que más y tener unos servicios públicos tercermundistas.