El desenlace de los presupuestos tensa a JxSí y la CUP y pone en guardia a la oposición

El PDECat advierte a sus socios de que no modificará la política tributaria y C’s amaga con pedir la dimisión de Puigdemont.

El proyecto de presupuestos de la Generalitat de 2017 amenaza con proporcionar nuevos quebraderos de cabeza a los socios soberanistas –Junts pel Sí y la CUP–, que, de momento, tan sólo han acordado la tramitación de las cuentas en el próximo pleno (20-22 de diciembre), pero no su aprobación. Los anticapitalistas insisten en mejorar los ingresos de la Generalitat mediante nuevos impuestos a las rentas más altas, pero el PDECat se niega a «estigmatizar a determinados sectores económicos y sociales», lo que significa que no está dispuesto a aplicar nuevas subidas en tributos como el IRPF, Sucesiones y Patrimonio. «El proyecto no tiene por qué cambiar», subrayó ayer la coordinadora general del PDECat, Marta Pascal, en una entrevista en Ep.

La negativa de la vieja Convergència a incrementar la presión fiscal disgusta a la CUP, que ha evitado por el momento comprometerse a apoyar las cuentas del Govern. «No son ni serán los presupuestos de la CUP», subrayan los anticapitalistas.

Para conseguir que la CUP dé su brazo a torcer, la coalición de Junts pel Sí (PDECat y ERC) están usando el referéndum como espantajo. «Sin presupuestos no hacen falta cumbres por el referéndum», dicen desde Esquerra. Pero la CUP no parece muy intimidada por esta amenaza y está dispuesta a mantener el pulso hasta el final con JxSí.

La oposición observa con atención todo el trámite presupuestario. No sólo el acuerdo que puedan alcanzar el bloque soberanista, sino también las presuntas ilegalidades de un proyecto que tiene todos los números de acabar en el Tribunal Constitucional por incluir una partida para costear el referéndum de autodeterminación. El portavoz parlamentario de C’s, Carlos Carrizosa, consideró ayer que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, tendría que «dimitir» y convocar elecciones si el TC tumba los presupuestos. Según afirmó Carrizosa en una entrevista en Efe, las partidas destinadas tanto a la organización del referéndum (para el que se reservan 5,8 millones) así como las previstas para la construcción de estructuras de Estado «chocan clarísimamente con el mandato del TC de no desarrollar la resolución secesionista que aprobó el Parlament» el 9 de noviembre de 2015.

«A nadie le va a sorprender que el Gobierno de España, al final, acabe impugnando esta ley de presupuestos. Si esto ocurre, será la crónica de una muerte anunciada, porque el Govern ya sabe que estos presupuestos no van a salir adelante», dijo.

Para el dirigente de C’s, es el propio Govern el que se arriesga a tener que «prorrogar nuevamente» los presupuestos y llevar la política catalana al «colapso», al haber incluido partidas que pueden dinamitar la validez de las cuentas para el próximo año.