«La independencia dejaría un 30% de jubilados sin pensión»

Albiol anuncia una campaña a pie de calle para explicar los perjuicios de la separación de Cataluña para los pensionistas.

«Pisar más la calle y menos moqueta». Con esa declaración de intenciones asumió la presidencia del PP catalán, Xavier García Albiol. Y ese espíritu es el que ha impreso a todas las iniciativas que el partido está llevando a cabo desde que tomó las riendas, primero con la campaña «emotiva» «La Cataluña valiente» en la que están desplegando carpas del partido por todo el territorio hasta finales de mes, y ahora con una campaña que se alargará hasta septiembre dirigida a los jubilados para alertar de las consecuencias perniciosas que tendría la independencia de Cataluña.

Según los datos que el líder popular expuso ayer en rueda de prensa, un 30 por ciento de los pensionistas no cobrarían su pensión en una Cataluña independendiente. Estos números, que extrajo a partir de datos oficiales del Gobierno, los obtuvo tras restar las aportaciones que realizan los trabajadores catalanes para pagar «pensiones de todo tipo» y los costes que estas tienen. En este sentido, cifró en 16.668 millones de euros las contribuciones de los empleados catalanes, y en 23.140 millones de euros los costes de las pensiones, lo que supondría un déficit que alcanzaría los 6.000 millones de euros.

«Con las pensiones de los jubilados no se juega», advirtió Albiol, que reivindicó la conveniencia de esta campaña a pie de calle para explicar «cara a cara» a los pensionistas «la verdad». «La independencia tiene mucho riesgo y es muy peligrosa», sostuvo el dirigente popular, que consideró que llegado el momento de que los catalanes dejen de ser víctimas de «una burda manipulación». Con esta campaña, además, el partido redobla su presencia en la calle, justo en un momento en el que el proceso independentista entra en la fase decisiva, aunque llega con poco fuelle, y paradójicamente en un momento en el que las entidades y partidos favorables a la secesión han hecho tímidos intentos por arrancar una campaña a favor del «sí» en un eventual referéndum.

En este punto reivindicó la filosofía que está siguiendo su partido para conectar con la calle y neutralizar, al mismo tiempo, la presencia que tienen las entidades independentistas como la Asamblea Nacional Catalana u Òmnium Cultural. «La situación política catalana no es para estar encerrado en las sedes de los partidos, sino que debe estar en la calle», añadió Albiol.

Finalmente, avanzó que no asistirá al acto que celebrará el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el próximo 22 de mayo en Madrid si se convierte en un «mitin» soberanista.