Obesidad

Los catalanes tienen hábitos más saludables, pero descuidan a sus hijos

Los niños comen más productos hipercalóricos y son más sedentarios: Uno de cada tres tiene sobrepeso.. La brecha de género también existe en la salud: Las mujeres se cuidan más, pero enferman más

Sólo un 33% de los niños y un 28% de las niñas hace como mínimo una hora al día de deporte o juego en el parque o la calle
Sólo un 33% de los niños y un 28% de las niñas hace como mínimo una hora al día de deporte o juego en el parque o la callelarazon

En un mundo en el que las palabras «running», «veggie» y «bio» son tendencia, los catalanes no quieren ser menos y poco a poco se suman a la moda de adquirir hábitos saludables.

En un mundo en el que las palabras «running», «veggie» y «bio» son tendencia, los catalanes no quieren ser menos y poco a poco se suman a la moda de adquirir hábitos saludables. Fuman menos que nunca, desde que hay registros del consumo de tabaco, también beben menos alcohol y son más los que hacen ejercicio físico y consumen cinco raciones de fruta o verdura al día. La recién estrenada consellera de Salud, Alba Vergés, aplaudía ayer la noticia durante la presentación de la Encuesta de Salud de Cataluña correspondiente al año 2017. Pero fue un aplauso corto. Porque el instinto le hizo llevarse las manos a la cabeza cuando vio los resultados del estilo de vida que lleva la población infantil.

Mientras los padres toman conciencia y se cuidan más, los niños adquieren peores hábitos. Uno de cada tres niños de 3 a 14 años come con frecuencia productos hipercalóricos, casi diez puntos más que en la anterior encuesta, elaborada entre 2013 y 2014, en plena crisis. Entonces, los niños que comían frecuentemente comida basura rozaban el 25 %. Además, 4 de cada 10 tienen un ocio sedentario, miran la televisión o están conectados a un smartphone u ordenador dos horas o más al día. Son diez puntos por encima de los que practican un ocio activo, un 31%, eso es tener al menos muna hora de actividad física al día. El resultado de esta tendencia es que el 36% de los niños de 6 a 12 años tiene un exceso de peso.

Hay más niñas con sobrepeso, pero más niños obesos. A la espera de la próxima encuesta, donde se verá si la tasa sobre bebidas azucaradas tiene efecto, 1 de cada 10 niños consume una bebida azucarada al día. Este porcentaje se dobla en el caso de los adultos. Un estudio reciente de la Universidad Pompeu Fabra, señalaba que el consumo de bebidas azucaradas había bajado un 22% desde que este impuesto entró en vigor, pero era un estudio parcial que sólo analizaba el comportamiento de los clientes de una cadena de supermercados.

Hace dos días, coincidiendo con la celebración de la Semana de los Horarios, con la que se pretende seducir a la población para que se sume a la revolución horaria – a ver si España se acerca a Europa–, el Sindicato de Médicos alertaba de que cenar demasiado tarde y dormir poco perjudica seriamente la salud. El 25% de los niños menores de 15 años duerme menos de 9 horas. Y un 20% de los adultos duerme menos de 6 horas.

Aunque el programa de la sanidad pública catalana de cribado de cáncer de mama ha conseguido que 9 de cada 10 mujeres se hagan mamografías, siguen habiendo diferencias significativas en la salud de las personas dependiendo de la clase social. La clase obrera fuma más, hace menos deporte, duerme menos, tiene más sobrepeso y más problemas de salud mental. Los hijos de madres con menos estudios también duermen menos y beben más bebidas azucaradas.

El peso de la casa

La brecha de género en la salud también existe. Las mujeres se cuidan más, pero tienen peor salud. Fuman menos (18,5% vs 29,7%); beben menos alcohol (1,5% vs 5,4%) y siguen más la dieta mediterránea (65% vs 56%). Pero sufren más depresión (8,8% vs 3,6%) y enfermedades crónicas. Las estadísticas muestran que ellas dedican el doble de tiempo a cuidar a los niños y al trabajo doméstico. También 3 de cada 4 mayores de 75 años que viven solos son mujeres. A falta de analizar los resultado, el peso de la casa afecta la salud.