Mas arenga a los consellers y altos cargos para encarar un curso clave

«Disípate, oh noche! ¡Ocultaros estrellas! ¡Al alba venceré! ¡Venceré, venceré!». Con estos versos acaba el «Nessum dorma», el aria de la ópera «Turandot», de Puccini, que también pone el broche final al famoso vídeo con imágenes de la película «Gladiator» con el que Pep Guardiola motivó a los jugadores del Barça antes de vencer en el estadio olímpico de Roma. Historias como la de Guardiola ayudan a simplificar algo tan complejo de ejercer como el liderazgo. Sin montajes audiovisuales, sólo con la palabra, Artur Mas intentará insuflar hoy ánimos a los suyos para encarar el nuevo curso político, el más difícil y trascendente de los tres que ha afrontado el actual president de la Generalitat, desde que cogió las riendas del gobierno catalán, en 2010.

Esta tarde, ha convocado a sus consellers, altos cargos y responsables de las empresas públicas a un encuentro de carácter extraordinario y privado. En total, serán unas 250 personas. Esta convocatoria solía hacerse en Navidad, pero dada la trascendencia del nuevo curso político, Mas la ha avanzado con la voluntad de motivar a su equipo a gestionar una situación complicada y animarlo ante la tormenta política que se avecina a razón de la consulta soberanista

La consulta

Mas se juega en el próximo año su carrera política, que en las últimas elecciones apostó a celebrar una consulta soberanista. En este curso político, se verá el desenlace de la jugada, si consigue las herramientas para poder convocar el referéndum o no.

Como sucedió el año pasado, la Diada tendrá un papel importante. Si la cadena humana, organizada por la Assemblea Nacional de Catalunya (ANC), en favor de la independencia, es un éxito, el proyecto soberanista de Mas ganará legitimidad. Hasta después del 11 de septiembre, Mariano Rajoy, no tiene previsto responder a la carta que le envió Mas para pedirle la consulta con la intención de no sublevar a los soberanistas con su negativa.

Rajoy prometió analizar la propuesta, pero la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ya ha avanzado que no facilitará una consulta «ilegal». Para convocar un referéndum, el Congreso debe autorizarlo y el presidente trasladar la propuesta al Rey, que debe de autorizarlo en segunda instancia. La otra posibilidad que tiene Mas es presentar una propuesta de reforma de la Constitución en las Cortes.

Fecha y pregunta

Previendo que la respuesta de Rajoy será negativa y que con un PP con mayoría en el Congreso, la reforma constitucional no tiene trayectoria, Mas prepara su alternativa. El Parlament aprobará este otoño la ley de consultas catalana para dar cobertura a un referéndum con carácter no vinculante.

El pacto con ERC contempla tener las herramientas este año para poder celebrar la consulta en 2014. Queda decidir fecha y pregunta. Pero cabe la posibilidad de que el Gobierno lleve la ley catalana de consultas ante el Tribunal Constitucional (TC) e, incluso, se inicie un proceso de aprobar e impugnar leyes eterno. Ante este escenario, el primer informe del Consell Assessor de la Transició Nacional, que tiene pendientes 18 estudios más para diseñar el futuro estado catalán, contempla otras alternativas como convocar unas elecciones plebiscitarias.

Presupuestos

Paralelamente al desarrollo de su proyecto soberanista, Mas deberá gestionar la tensión presupuestaria –cerrar 2013 con un déficit del 1,58 por ciento y aprobar las cuentas de 2014– , además de seguir gobernando con una delicada situación financiera. En octubre empezará a negociar los presupuestos de 2014, en un escenario arisco, después de que ICV haya anunciado que llevará la prórroga presupuestaria a los tribunales.

Rajoy apuesta por el diálogo con Mas para negociar un nuevo sistema de financiación. Mas prevé aumentar los ingresos, al margen de un nuevo modelo, negociando el pago Pendiente de deudas del Gobierno.

Legislar

Hasta la fecha, el Parlament sólo ha aprobado una ley, pero en el nuevo periodo de sesiones se prevé más actividad. Al margen del debate de política general, hay más de 40 iniciativas legislativas en trámite, como la citada ley de consultas.