Un cabaret para pasear por la Barcelona canalla

El Lliure de Montjuïc presenta un espctáculo en clave femenina en homenaje a Capmany, Motta o Sampere.

La Barcelona alegre y festiva, liberada y sin prejuicios. Esa es la que se podía encontrar en el Paral·lel en los años 20 y 30 haciendo del cabaret uno de sus principales ejes. Eso es lo que han querido reivindicar Bárbara Granados y Maria Molins en «CabaretA», un espectáculo que entre el 5 y el 14 de abril puede verse en el Montjuïc Espai Lliure y que fue ayer presentado.

El espectáculo cuenta con dramaturgia de Joan Maria Segura, Maria Molins y Bárbara Granados, siendo esta última también la responsable de la composición y dirección musical, mientras que la dirección escénica de Joan Maria Segura Bernadas. Todo ello con no pocos guiños a lo que Molins y Granados calificaron como «un cabaret como los de antes», es decir, los de Maria Aurèlia Capmany, así como los de, más cercanos en el tiempo, Mary Sampere, Guillermina Motta, Ángel Pavlovsky o Núria Feliu, sin olvidar aquellos míticos que se podían ver en El Molino del Paral·lel cuando esta avenida era uno de los principales ejes teatrales de la capital catalana.

«Es una declaración de amor a la Barcelona de los años 20 y 30, a la Barcelona canalla y artística, la de la calle y la libertad, la Barcelona multilíngüe», explicó Maria Molins. La obra, que ya recogió buenas críticas el pasado mes de julio, es, según sus autoras, «un espectáculo de cabaret en clave femenina».

Las dos principales intérpretes están acompañadas en el escenario por música en directo que en el Lliure ejecutarán Dick Them, Miquel Malirach y Jordi Morales.

Por su parte, Joan Maria Segura explicó que «CabaretA» es «un cabaret con muchos efectos que, en efecto, con sus defectos, habla de los temas que nos afectan», con unas artistas que «critican, cantan, bailan, enseñan muslo y nos tocan música».

Nada más iniciarse la obra, que Maria Molins calificó de «fresca», hay una canción en la que se comenta cómo se irá desarrollando el montaje, de hora y veinticinco minutos de duración, con temas musicales creados por Bárbara, biznieta del compositor Enric Granados. La génesis del espectáculo empezó a gestarse hace más de cinco años cuando las dos protagonistas coincidieron en la Sala Muntaner, pero fue el año pasado cuando se le acabó de dar forma. Las dos intérpretes la consideran «muy divertida» con canciones en las que aluden a cuestiones de actualidad y también hay momentos de improvisación, como ocurría con las tradicionales obras de cabaret.

En «CabaretA» tanto se puede escuchar un tema sobre gente tóxica, como un canción sobre los cuentos infantiles, como hay un texto que hace una autocrítica sobre el denominado «procés», aunque «sin posicionarnos ni a favor ni en contra». Maria Molins reconoce que llevaba años con «ganas de cantar» y se ha preparado a «conciencia».