Un plan para evitar «tapones» en Fallas y desalojar la plaza

Evitar las aglomeraciones en las calles con mayor tránsito y prepararse para el posible desalojo de la plaza donde se disparan las «mascletaes» son dos de los nuevos planes que el Ayuntamiento de Valencia llevará a cabo durante las próximas Fallas. En cuanto a la primera iniciativa, serán los agentes de la Policía Local de Valencia, junto con voluntarios de Protección Civil, los encargados de vigilar el flujo de gente que visita la iluminación de los monumentos y asiste a los espectáculos de pólvora. De hecho, se estudiará si se establecen rutas de entrada y salida que faciliten el paso del público.

Así, este año, y de forma experimental, desde el día 8 de marzo entre las 18:30 y las 22:00 horas se ubicarán seis voluntarios en el entorno de las calles Sueca y Cuba, así como en el túnel peatonal de la Gran Vía Germanías.

Respecto al plan de evacuación de la plaza del Ayuntamiento (que puede llegar a albergar hasta 100.000 individuos), el concejal de Seguridad Ciudadana, Miquel Domínguez, explicó que ya se ha realizado una simulación virtual de movimiento de personas a fin de estudiar cómo reducir el tiempo de respuesta en caso de emergencia. Para ello, habrá también voluntarios no solo en la zona interior vallada, sino también en los extremos exteriores de las calles colindantes más concurridas. Serán estos los que den la voz de alarma en caso de ser necesario.

Y si eso llega a suceder, otra de las novedades que podrán verse será la presencia de grupos sanitarios de la Cruz Roja montados en bicicleta por las zonas más concurridas de la ciudad, donde el acceso en vehículo a motor suele ser prácticamente imposible.

Por otra parte, el Consistorio ha autorizado este año el montaje de 232 carpas y la celebración de 338 actividades. Las primeras podrán levantarse a partir del día 5 y tienen permiso para celebrar verbenas hasta las cuatro de la madrugada los días 7 y 8 y desde el 14 hasta el 19.

La instalación de las jaimas y los monumentos falleros provocarán el corte, total o parcial, de cuatrocientas calles.

El Ayuntamiento mantendrá, un año más y desde el día 2 al 20 , las inspecciones a puestos de churros y buñuelos, prestando especial atención a la contaminación acústica que pudieran provocar.

La alternativa para aquellos que deseen «escapar del ruido» pasa por las bibliotecas de las playas, que permanecerán abiertas durante estos días.