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La operación Canalejas ultima el rescate de su patrimonio histórico
El Grupo Villar Mir restaura todos los elementos singulares de las antiguas oficinas bancarias. La vidriera Maumejean volverá a su ubicación original después de ser desplazada por el ascensor que llegaba al despacho de Mario Conde
El Grupo Villar Mir restaura todos los elementos singulares de las antiguas oficinas bancarias. La vidriera Maumejean volverá a su ubicación original después de ser desplazada por el ascensor que llegaba al despacho de Mario Conde
El Grupo Villar Mir y OHL ya está ultimando las labores de restauración de los elementos singulares y protegidos por la Ley de Patrimonio de la manzana de Canalejas, que aglutina los edificios situados en el número 1 de la plaza, así como los números 6, 8, 10, 12 y 14 de Alcalá, que en 2017 albergará un centro comercial, un hotel de cinco estrellas, 30 residencias de lujo y un aparcamiento subterráneo.
El complejo, que Villar Mir adquirió al Banco Santander por 215 millones, llevaba abandonado desde hacía una década; un tiempo que, unido a las reformas que durante años se han llevado a cabo en estos edificios en función del propietario y de la actividad que en éstos se desarrollaba, ha dejado mella en su techos, suelos y paredes, algunos protegidos por la Ley de Patrimonio Histórico.
Un legado que en parte está elevado a Bien de Interés Cultural y que, en contra de algunas acusaciones vertidas en los últimos meses, la empresa sostiene que no sólo se ha mantenido, sino que además se ha restaurado para que vuelva a lucir con el resplandor de su construcción.
Decoración clásica
LA RAZÓN ha tenido acceso a los detalles sobre el proceso de «rescate» de algunos elementos singulares del complejo, que volverán a sus ubicaciones originales una vez finalizadas las obras como parte de la decoración de estilo clásico que impera en la mayoría de los hoteles de la exclusiva cadena canadiense Four Seasons, como los de París, Budapest o Florencia, que se caracterizan por estar instalados en edificios históricos. De esta manera, desde OHL explicaron a este diario que «todos» los detalles ornamentales singulares que se han hallado en el interior de los edificios «han sido preservados y mejorados no sólo por obligación, sino por interés nuestro en la decoración futura».
El Grupo Villar Mir ha encargado a talleres artesanales la restauración de puertas, ventanas, antiguos mostradores, capiteles y vidrieras, como la de 120 metros cuadrados que firma Maumejean, que techará el «lobby» del hotel, volviendo a su ubicación inicial, de la que fue alejada en 1998 cuando se introdujo un ascensor interior que llagaba hasta el despacho del antiguo director del banco, Mario Conde.
De esta manera, el antiguo patio de operaciones del Banesto en Alcalá 14 se convertirá en el vestíbulo del primer Four Seasons que se abrirá en España, de 215 habitaciones, en el que, además de la vidriera de 1945 restaurada pieza a pieza, podrán verse los antiguos capiteles y pilares. Allí se ubicará el gran vestíbulo del hotel, junto con otros elementos ornamentales, como chimeneas, conjuntos de carpinterías, cerrajerías y molduras.
De hecho, la alteración de algunos de los elementos históricos del edificio ha sido uno de los principales escollos con los que se ha encontrado la compañía a la hora de cumplir con los «exigentes» criterios de conservación y respeto de los elementos singulares del complejo, cuya conservación, mantenimiento y estabilidad, según han explicado desde el Grupo Villar Mir a este diario, se habían ido adaptado al uso que han tenido en los últimos años: «Todos ellos fueron transformados en oficinas bancarias y sujetos a sucesivas reformas que desvirtuaron su configuración inicial», afirman estas mismas fuentes.
Pero no sólo la conservación de los elementos ornamentales está resultando ser un obstáculo en la construcción del nuevo complejo Canalejas. Según relataron desde la compañía, la actual estructura de forjados interiores «no es segura, es inaplicable a otros usos y carece de valor histórico o patrimonial», por lo que se sustituirá por una de nueva construcción.
Para realizar estos trabajos, desde la compañía explican que ha sido necesario demoler gran parte del interior de algunos edificios e incluso de fachadas, como la del número 6 de Alcalá, levantada en 1978 y que, pese a no presentar importantes elementos de interés arquitectónico (fue una ampliación de la del número 8), se desmontó piedra a piedra para volver a su estado original una vez salgan las excavadoras del complejo, que contará con un aparcamiento subterráneo con más de 400 plazas.
La conservación de las fachadas, protegidas por la Ley de Patrimonio Histórico, es otro de los elementos que caracterizan esta complicada obra. Todas ellas se restaurarán y destacan algunas como la de Canalejas, de 1902 del arquitecto Eduardo Adaro y estilo renacentista, declarada Bien de Interés Cultural, entre otros motivos por sus originales elementos ornamentales. O la que ocupa el número 14 de la calle Alcalá, de 1887, ejemplo de la arquitectura monumental ecléctica del siglo XIX que firmó José Grasses Riera.
Recopilación de firmas
Precisamente han sido estas singularidades, halladas en esta fase de demolición y nueva construcción lo que ha retrasado ligeramente el proyecto, que estaba previsto inaugurarse en octubre de 2016 y que finalmente no estará listo hasta la primavera de 2017. En la actualidad, además de llevar a cabo la reestructuración el complejo y de haber cerrado un crédito de 268 millones de euros para la financiación del proyecto, ya se están negociando cuáles serán las firmas de «lujo asequible» que se ubicarán en la zona comercial que tendrá una extensión de 16.000 metros cuadrados repartidos en tres plantas.
Además, la nueva manzana de Canalejas-Alcalá contará con dos restaurantes, spa, gimnasio y piscina interior. Además del hotel de cinco estrellas gran lujo, el complejo contará con unas 30 residencias en propiedad que se repartirán en una superficie de 6.000 metros cuadrados.
- La restauración del Patrimonio de Canalejas, piedra a piedra
Sin duda, una de las joyas de la manzana de Canalejas se encuentra en sus fachadas, que gozan de una elevada protección artística por parte de la Dirección General de Patrimonio. De hecho, uno de los momentos más controvertidos de la restauración llegó con la autorización que se dio a la demolición de la fachada de Alcalá, 6, que sin embargo, tras las obras en el interior, será restituida a su estado original. De entre las fachadas más relevantes del conjunto, destacan la del número 1 de Canalejas –original de 1902 de estilo neorrenacentista y declarada Bien de Interés Cultural– y la de Alcalá 14, de 1887, ejemplo de arquitectura monumental ecléctica del XIX.
Las fachadas, el corazón del proyecto
Sin duda, una de las joyas de la manzana de Canalejas se encuentra en sus fachadas, que gozan de una elevada protección artística por parte de la Dirección General de Patrimonio. De hecho, uno de los momentos más controvertidos de la restauración llegó con la autorización que se dio a la demolición de la fachada de Alcalá, 6, que sin embargo, tras las obras en el interior, será restituida a su estado original. De entre las fachadas más relevantes del conjunto, destacan la del número 1 de Canalejas –original de 1902 de estilo neorrenacentista y declarada Bien de Interés Cultural– y la de Alcalá 14, de 1887, ejemplo de arquitectura monumental ecléctica del XIX.
Celosías y vidrieras art-decó
Dentro de los elementos decorativos que serán restaurados para su posterior reincorporación al complejo Canalejas, están las celosías y las vidrieras. Se trata de las celosías metálicas situadas en el vestíbulo de acceso de Alcalá, 10. Son elementos originales de fundición de bronce y con una clara inspiración Artdecó. Deberán ser restauradas y está prevista la realización de réplicas en la cantidad necesaria para su ubicación en el «lobby» del hotel. Las vidrieras situadas en el patio de operaciones de este punto también serán restauradas por el taller Artevisa.
Un cielo «años 40» para el Four Seasons
La vidriera de la firma Maumejean, ubicada hasta ahora en el número 14 de la calle Alcalá, se reubicará tras su restauración en el «lobby» del hotel Four Seasons. Volverá a su situación original en el nivel del forjado de la planta segunda, tal y como estuvo hasta 1998. Se restaurará con vidrios antiguos y utilizando técnicas de los años 40 para devolverla a su estado original.
La única estancia que conserva su estado original
El despacho de la segunda planta de Alcalá, 14 es la única estancia interior de los edificios de Canalejas que conserva su estado original. Será restaurado en su conjunto, incluyendo las molduras de escayola, la chimenea y el espejo, así como la carpintería, el suelo y las paredes.
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