Política

Infraestructuras

Las piscinas municipales pierden 5.000 bañistas al día

El pasado verano se registró el número más bajo de usuarios de las instalaciones públicas desde 2012.

El equipo de Gobierno de Carmena ha bajado las tarifas y ampliado los días de acceso a las piscinas municipales pero no ha logrado parar la sangría de usuarios durante la temporada de verano
El equipo de Gobierno de Carmena ha bajado las tarifas y ampliado los días de acceso a las piscinas municipales pero no ha logrado parar la sangría de usuarios durante la temporada de veranolarazon

El pasado verano se registró el número más bajo de usuarios de las instalaciones públicas desde 2012.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, no consigue acertar con la gestión de las instalaciones deportivas municipales. Si la última encuesta de calidad de los usuarios de los polideportivos públicos madrileños registraba peores datos que en la legislatura anterior, los malos datos provienen ahora de aquellos que han acudido a las piscinas municipales durante la temporada de verano. En el último año han perdido más de 300.000 asistentes y se ha registrado el dato más bajo de usuarios por día desde 2011.

Carmena comenzó su mandato municipal con buenas cifras en la asistencia a los espacios de baño veraniego que en 2015 abrió el consistorio durante 100 días, alcanzando un total de 1.445.251 visitantes, y una ratio de 14.452 usuarios por día. La cantidad de personas que utilizaron este servicio municipal en su segundo año de legislatura se incrementó notablemente, alcanzando 1.764.237 personas y un ratio de 14.580 usuarios por día, gracias en parte a que se aumentó a 121 los días de apertura de las piscinas municipales.

Sin embargo esta medida, que se incrementó a 128 días las temporadas 2017 y 2018 no han sido suficientes para parar la sangría de bañistas que los dos últimos veranos ha afectado a las instalaciones deportivas municipales. Y es que la ratio de usuarios día se desplomó a 12.500 en 2017 y a un mínimo de 10.109 el pasado verano. Se trata del mínimo histórico desde 2011 –año en el que, además, se alcanzó el máximo histórico de 15.272 usuarios por día–, con muchos más días de apertura que el anterior año en el que hubo pocos bañistas que fue en 212, con 11.176 usuarios por día. Todo ello pese a que no sólo se han ampliado los días de apertura sino que también se han bajado las tarifas de acceso a estas instalaciones deportivas para incentivar su uso durante la época estival.

Centros cerrados

Los madrileños ya no quieren acudir a las piscinas municipales entre otros motivos por «la incompetencia a la hora de gestionar los servicios públicos y la falta de planificación para ejecutar las inversiones previstas», según la concejala del PP, Carmen Castell, que criticó que en «tres años de mandato se han perdido 2.000 usuarios al día por temporada». Castell recordó que en la campaña 2016 se anunció la apertura de 21 piscinas pero, en la práctica, «hasta ocho presentaron graves problemas». El siguiente año, 2017, hubo seis piscinas cerradas y, el pasado año, no se han podido utilizar una decena de instalaciones.

A día de hoy, según informa la web municipal, hay ocho instalaciones deportivas municipales cuyas piscinas se encuentran cerradas por diversos motivos como obras de mantenimiento por conflictos con la concesión, como es el caso del centro deportivo Fuente del Berro. En concreto, tienen incidencias las piscinas de Valdebernardo, Pradillo, Plata y Castaña, Moratalaz, Barajas, Alfredo Goyeneche y Aluche. Con todo, en algunas de ellas está previsto que terminen las obras antes de noviembre mientras que en otros comienzan precisamente el mes que viene las reformas necesarias.