Los accidentes mortales en la Región se reducen en más de un 55 por ciento

El consejero de Educación, Formación y Empleo, Constantino Sotoca, destacó ayer que la Región «ha vuelto a alcanzar, en el último año, la tasa de siniestralidad más baja de su historia», con 28 accidentes por cada mil trabajadores, lo que supone una reducción del 20 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior. Sotoca precisó que la reducción afecta a todos los sectores productivos y ha resaltado que, «en lo que llevamos de año, es especialmente significativa la reducción de accidentes mortales, que ha registrado una reducción de más de un 55 por ciento».

En este sentido, el titular de Empleo aseguró que «la mayoría de estos accidentes no ocurrieron como consecuencia de la falta de medidas de prevención, sino que se trata, en su mayoría, de accidentes en misión, y por patologías no traumáticas».

Para Sotoca, estos datos «evidencian un descenso continuado en los índices de siniestralidad regional, lo que nos obliga a seguir manteniendo un esfuerzo permanente y constante en materia preventiva». «Es un objetivo prioritario del Gobierno regional, compartido además, por empresarios y trabajadores», dijo el consejero, quien indicó que «se está desarrollando una intensa labor de sensibilización, de asesoramiento y de control que está teniendo una incidencia directa y positiva en el mercado laboral».

Así, explicó que «casi el cien por cien de los requerimientos realizados por los técnicos del Instituto de Seguridad y Salud Laboral a las más de 400 empresas visitadas para asesorar y vigilar el cumplimiento de la normativa fueron atendido por los empresarios en plazo y de forma voluntaria». Para Sotoca, «es un dato positivo que refleja también la creciente sensibilidad por parte del tejido empresarial». También recordó «la importancia de seguir apostando por la prevención de riesgos laborales como un elemento estratégico más, y no sólo porque lo exija el cumplimiento de la normativa, sino porque esa prevención es también motor de competitividad y productividad para nuestras empresas». En este sentido, afirmó que «es un mensaje que debemos seguir trasladando a la sociedad con más fuerza, si cabe, en estos momentos de dificultad económica, y en los que podemos correr el riesgo de relegar la gestión preventiva a un segundo plano de la estrategia empresarial».

El consejero, acompañado de los secretarios generales de UGT y CCOO, Antonio Jiménez y Daniel Bueno, respectivamente, así como por el presidente de Croem, Miguel del Toro, hizo entrega de los Premios a las Buenas Prácticas en Prevención de Riesgos Laborales «Antonio Ruiz Giménez».