Región de Murcia

Mar Menor: el reto de regenerar y proteger un ecosistema «único»

La Consejería de Sanidad indica, cada semana, que la calidad del agua es apta para el baño

El Ejecutivo de Sánchez ha logrado el «vertido cero» gracias al cierre de tuberías que vertían nitratos a la laguna
El Ejecutivo de Sánchez ha logrado el «vertido cero» gracias al cierre de tuberías que vertían nitratos a la lagunalarazon

La Consejería de Sanidad indica, cada semana, que la calidad del agua es apta para el baño

El Mar Menor es una prioridad para el Gobierno regional por el atractivo que supone su carácter ambiental y turístico. Un enclave «único que hay que proteger y potenciar», y así es como lo considera el Gobierno de Pedro Antonio Sánchez, quien nada más llegar al Ejecutivo tomó las primeras medidas para hacer compatible la protección de la laguna con su desarrollo económico, agrario y turístico, a través de la puesta en marcha de una de las tres estrategias de inversión que la Unión Europea concedió a España, con 64 millones de euros.

Después de años trabajando con la comunidad científica para resolver sus problemas, se han destinado a la laguna salada más de 100 millones de euros, principalmente, en actuaciones de saneamiento y depuración para corregir la calidad de las aguas urbanas y agrícolas que se vierten en la laguna.

La imagen que presenta este año la zona con el aumento de fitoplancton ha exigido actuaciones extraordinarias y el impulso de medidas planteadas por los expertos para su solución definitiva. «El Gobierno está actuando para que esta situación no se vuelva a repetir», aseguró Sánchez hace unas semanas, y poco a poco, se han dado algunos pasos.

«Vertido cero»

El pasado 11 de agosto, la Consejería de Agricultura, Agua y Medio Ambiente anunció que se había alcanzado el «vertido cero» a la laguna, gracias al sellado de las conducciones que recogían los residuos de la actividad agrícola.

Paralelamente, el 17 del mismo mes se iniciaron los trabajos de emergencia para el acondicionamiento y limpieza de la Rambla del Albujón, que desemboca en la laguna, consistente en la construcción de una tubería de cuatro kilómetros que llevará las aguas de drenaje de la Rambla hasta la desalobradora situada en Cabo de Palos, donde serán tratadas para mejorar su calidad.

Del mismo modo, los agricultores del Campo de Cartagena también están «plenamente» implicados en la conservación de la laguna, y por ello se puso en marcha la instalación de plantas de bioelectrogénesis para la eliminación de nitratos.

Para lograr la regeneración del Mar Menor ha tomado como referencia las actuaciones llevadas a cabo por otras autonomías, como la Valenciana, y por ello, se han creado humedales artificiales y filtros verdes que dieron buenos resultados en la Albufera de Valencia. Este sistema reducirá en un 70 por ciento el volumen de nitratos.

El fruto de las medidas puestas en práctica por el Gobierno es validado cada semana por la Consejería de Sanidad, tras la toma de muestras de la calidad de las aguas, cuyos resultados indican que son aptas para el baño.