Tener una cuenta bancaria es como tener un móvil, no es obligatorio, pero cuesta vivir sin ella. Solo el 2% de los españoles de más de 15 años no tiene una cuenta corriente, según el Banco Mundial. Una cifra que refleja el alto grado de bancarización de nuestro país. Pero ¿es suficiente tener una?

El problema de tener solo una cuenta corriente es que, ante cualquier eventualidad, no tendremos una segunda cuenta que nos sirva como salvavidas para operar de forma temporal mientras se soluciona el problema. “Vale la pena, al menos, tener dos cuentas en dos bancos diferentes por si uno de ellos falla, poder recurrir al otro”, explican los expertos del comparador de productos financieros HelpMyCash.com.

4 razones para abrir una segunda cuenta

Pero ¿qué puede provocar que nuestra cuenta principal acabe fuera de servicio? Para empezar, la plataforma informática del banco puede caerse, lo que puede afectar a la operativa de los clientes. Además, la entidad puede bloquear la cuenta, una situación que puede alargase días e, incluso, semanas. Mientras la operativa de la cuenta esté restringida, el cliente no podrá ni pagar sus compras, ni sus recibos ni sacar su dinero.

Otra razón de peso para tener una segunda cuenta es la seguridad. Si un banco quiebra, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) es el encargado de reembolsar los depósitos y las cuentas, pero no lo hace al momento, sino que tiene un plazo de hasta diez días hábiles para pagar. Además, este organismo solo garantiza el reembolso de los primeros 100.000 euros que tenga el cliente en cada banco, por lo que todo el dinero que supere esa cifra está desprotegido.

Si se tienen más de 100.000 euros en el banco, conviene repartirlos en varias entidades para que todos los ahorros estén bajo el paraguas del FGD. Y en el caso de que la cantidad sea inferior, tampoco está de más dividirla entre varias entidades para no tener todos los huevos en la misma cesta. “Y no hace falta conformarse con solo dos cuentas, podemos abrir tres o cuatro o las que nos hagan falta. Así, no solo tendremos otra cuenta por seguridad, sino que podremos conseguir ventajas extra que no nos da nuestro banco como rentabilidad, tarjetas para viajar, etc.”, explican en HelpMyCash.

Abrir una segunda cuenta bancaria es muy sencillo. Solo hace falta un ordenador o un smartphone y diez minutos. En unos minutos se puede abrir una cuenta nueva, aunque la tarjeta puede tardar una o dos semanas en llegar al domicilio.

Los principales bancos de España comercializan cuentas sin comisiones y sin condiciones que pueden cumplir esta función, ya que para mantenerlas no hace falta domiciliar una nómina, ni varios recibos ni mantener un saldo mínimo. La banca online también ofrece muchas opciones para tener una cuenta corriente gratuita sin ataduras.

Cuentas sin comisiones

Algunas cuentas sin comisiones ni condiciones tienen una ventaja extra que las hace muy atractivas: rentabilidad. Por lo que no solo pueden mantenerse como soporte en caso de que la cuenta principal falle, sino que pueden utilizarse para separar los ahorros de la cuenta principal y ganar intereses, señalan en HelpMyCash.

Por ejemplo, la Cuenta Online Sabadell tiene una rentabilidad del 2% TAE el primer año para un saldo de hasta 30.000 euros. Se pueden ganar hasta 600 euros brutos en intereses. Esta cuenta para nuevos clientes no tiene comisiones y no hace falta domiciliar una nómina ni cumplir otros requisitos para abrirla, por lo que se puede usar como cuenta habitual, como cuenta de ahorro o simplemente tenerla en un segundo plano hasta el día que se necesite. Eso sí, solo está disponible para nuevos clientes. Además, para hacer la cuenta más atractiva, el Sabadell acaba de añadir una nueva promoción para los primeros 20.000 nuevos clientes: si domicilian una nómina o una pensión o reciben una transferencia mensual de 700 euros, el banco les regala 250 euros.

Otra cuenta que combina rentabilidad y un regalo es la Cuenta Clara de Abanca sin comisiones para nuevos clientes. Esta cuenta no tiene condiciones, por lo que se puede abrir sin tener que preocuparse de cumplir ningún requisito. No obstante, los clientes que domicilien una nómina o pensión disfrutarán de una rentabilidad del 2% TAE durante un año para un saldo de hasta 15.000 euros. Además, si la nómina o la pensión es de al menos 1.200 euros al mes y se mantiene durante dos años, Abanca regala 300 euros netos.

La Cuenta Inteligente EVO también paga intereses. Los primeros 50.000 nuevos clientes que la contraten disfrutarán de una rentabilidad del 1% TAE para un saldo de hasta 30.000 euros hasta julio del próximo año. La cuenta no tiene comisiones ni requisitos, pero los clientes que domicilien sus ingresos u operen en bolsa aumentarán la rentabilidad de su cuenta hasta el 1,50% TAE.