Comer en las alturas, conocer Nueva York en Rolls-Royce y dormir en Four Seasons

El hotel neoyorquino Four Seasons es uno de los más prestigiosos del mundo. Nos vamos hasta allí para conocer qué hace tan especial y prestigioso a este hotel sobre las alturas en el que nos gustaría pasar las cuatro estaciones del año. En honor a su nombre, como no podía ser de otra manera.

Puedes encontrar sus instalaciones en las coordenadas situadas en Billionaires’ Row, en el corazón de Manhattan, a pocos pasos de Central Park. Fue diseñado por el reconocido arquitecto I.M. Pei y lo más característico de su diseño es su impresionante altura gracias a sus 52 pisos. Un edificio que compone un verdadero ejemplo del diseño moderno, pero que no pierde de vista una clara inspiración art déco. Modernidad y clasicismo que se encuentra en sus altísimos techos y florituras geométricas, evocando el más precioso y preciado mundo natural dentro de la urbe.

Pero una de sus aportaciones más lujosas viene de la mano de una experiencia gastronómica (casi) en el cielo. Los huéspedes que se alojan en una de sus suites de categoría especial o en una de sus Gotham Junior Suites, podrán disfrutar de unas vistas panorámicas de la ciudad con un menú de cinco estrellas, creado por el chef ejecutivo de Four Seasons, perfecto para celebraciones al aire libre y los momentos más románticos.

Después del tiempo gastronómico, nada como cerrar el día o la noche con un delicioso licor o cóctel en las alturas de Ty Bar.

Todo ello, por supuesto, después de una completísima visita por los encantos de la ciudad neoyorquina con chófer privado y a lomos de un lujoso Rolls-Royce acompañado de quien tú quieras. Así Nueva York se ve mejor, ¿no?

Una visita al hotel Four Seasons es vivir una auténtica experiencia de lujo y confort dentro del idílico torbellino de Manhattan.