Movilidad

El McLaren Artura GT4 muestra su lado más salvaje

Se revela como un coche de carreras V6 puro sin asistencia híbrida. Es 130 kilogramos más ligero que el coche de calle.

McLaren Artura GT4
McLaren Artura GT4McClaren

Al igual que Lotus, McLaren siempre ha tratado de mantener el peso al mínimo para maximizar las prestaciones. Incluso el Artura, con su intrincada cadena cinemática híbrida enchufable, sólo pesa 1.395 kg en su forma más ligera, antes de añadir los líquidos. Su equivalente en un coche de carreras reduce 130 kg (287 libras) para cumplir con la normativa GT4, que no permite los híbridos.

Al mismo tiempo, el Artura GT4 es más de 100 kg más ligero que el 570S GT4 al que sustituye. El cambio de un V8 a un V6 más compacto también ha contribuido a la dieta, y la unidad de seis cilindros por sí sola es lo suficientemente potente como para que la máquina de pista sea competitiva. El paquete de baterías instalado en el coche de carretera ha dejado paso a la pila de combustible de 110 litros y al sistema de propulsión auxiliar. Al reutilizar el mismo espacio, McLaren afirma que el peso sigue estando bajo y en el centro para mejorar el equilibrio.

McLaren Artura GT4
McLaren Artura GT4McClaren

Aparte de la simplificación del sistema de propulsión, el Artura GT4 recibe una caja de cambios diferente de siete velocidades que sustituye a la automática de ocho velocidades del coche de calle, en la que el motor eléctrico se utiliza para la marcha atrás. Tiene relaciones de cambio más cortas que su predecesor, junto con un diferencial mecánico de deslizamiento limitado montado en la parte trasera, al tiempo que se reduce el desgaste de los frenos en la parte trasera. El consumo de combustible también se ha reducido, mientras que la eficiencia de la refrigeración de los frenos ha aumentado.

McLaren Artura GT4
McLaren Artura GT4McLaren

Naturalmente, la variante de competición recibe un kit aerodinámico mucho más agresivo que permite una mayor carga aerodinámica en comparación con el 570S GT4 saliente. McLaren ha concebido un splitter delantero a medida y un nuevo alerón trasero con siete niveles de ajuste para adaptarse a varios tipos de circuitos. Nos han dicho que el coche de carreras es tan seguro como el 720S GT3, del que ha heredado el asiento del conductor y los pedales ajustables.

Los posibles compradores deben saber que va a costar la friolera de 235.000 euros, es decir, unos 11.700 euros más que el supercoche homologado para la calle.