Ironía de Ayuso ante el desinterés de Moncloa con la F1 en Madrid: "Cada vez que se alegren tendrán dos entradas"

A la izquierda, en la Comunidad de Madrid, parece que no le ha gustado mucho que la región albergue un Gran Premio de Fórmula Uno. De ahí que la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, bromease esta mañana de miércoles con que cada vez que alguien del Gobierno "se alegre públicamente" de que la Fórmula 1 llegue en 2026 a Madrid tendrá "dos entradas" y si lo hace en redes sociales, "cuatro".

Así lo ha indicado en una entrevista en "Cuatro", en la que ha señalado que piensa que hay tanta gente en Madrid que se alegra de la llegada de un Gran Premio y no va a poder acudir porque es "limitado" que para qué hacerle un hueco a la gente "que no está agradecida".

Ayuso ha defendido que la Fórmula 1 dejará en la región 10.000 puestos de trabajo directos y una inversión "de partida" de más de 500 millones de euros. Además, ha incidido en que numerosas empresas, grandes y pequeñas, podrán abrir en Madrid nuevos negocios.

"Criminalizar la vida"

En otro orden de cosas, Ayuso ha sostenido que desde el Gobierno de Pedro Sánchez "lo que están haciendo es criminalizar la vida normal y normalizar el crimen", haciendo que cuestiones de toda la vida sean "perseguidas" y todo sea "delito" mientras que los "atropellos contra la libertad, contra la prosperidad" y la "unidad de España" dan igual.

La dirigente madrileña ha criticado que ahora resulte "que hay dos terrorismos": "El terrorismo" y los que dan su apoyo "para estar en La Moncloa", porque aunque se han cometido "delitos de terror" ya no ese están "viendo de la misma manera".

"Estamos viendo cómo ya hay políticos que van a visitar a los presos de ETA a la cárcel. Si estamos viendo cosas que, ya nos lo decían las víctimas del terrorismo, que nos helarían la sangre. Y, efectivamente, están haciendo una inversión absoluta de valores y de la verdad para mantenerse en el poder", ha señalado.

Para la presidenta, el problema es que no hay que acostumbrarse sino que se tiene que ir con un programa electoral, con una defensa de las ideas y convencer y aquel que lo haga es el que debe ponerse "enfrente de las instituciones".

"El Gobierno se está volviendo profundamente autoritario", ha denunciado. En este sentido, ha criticado que el país se esté "hundiendo económicamente, endeudándose para las siguientes generaciones con la expulsión y la intervención de la empresa" así como que se esté arremetiendo contra "el Poder Judicial".