Una nueva vida para las esculturas al aire libre de la Castellana

A su lado pasan cada mañana miles de personas, y su emplazamiento, a la intemperie, pasa factura. Las 13 obras que conforman el Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana se someterán a un proceso de conservación y restauración que comenzará el 1 de agosto con una inversión de 70.000 euros y se prolongará durante ocho meses, según las previsiones municipales.

La delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, ha presentado este martes el proyecto y ha destacado que la restauración de estas 13 esculturas "es un paso más" en el cuidado del patrimonio de la ciudad. Según ha expresado la delegada, esta intervención permitirá "poner en valor un conjunto escultórico muy destacado que está al alcance de todos los ciudadanos".

Inaugurado oficialmente en 1979, este museo está situado bajo el paso elevado que conecta las calles de Juan Bravo y Eduardo Dato, en el paseo de la Castellana. Se trata de un espacio del patrimonio municipal que reúne 17 esculturas de artistas de la vanguardia española del siglo XX.

En total, en esta ocasión se intervendrá en las siguientes esculturas: 'Plaza-Escultura' (Gustavo Torner), 'Mediterránea' (Martín Chirino), 'Estructura permutacional' (Francisco Sobrino), 'Estructura hiperpoliédrica del espacio' (Rafael Leoz), 'Un món per a infants' (Andreu Alfaro), 'Estela de Venus' (Amadeo Gabino), 'Al otro lado del muro' (José María Subirachs), 'Proalí' (Marcel Martí), 'Proyecto para un monumento IV B' (Pablo Palazuelo), 'Volumen-relieve-arquitectura' (Gerardo Rueda), 'Toros ibéricos' (Alberto Sánchez), 'La Petite Faucille' (Julio González) y 'Unidades Yunta' (Pablo Serrano).

El proyecto parte de los estudios y análisis individualizados promovidos en 2022 por el Área de Cultura, Turismo y Deporte, que incluyeron la toma de muestras para identificar los materiales constituyentes, los procesos de alteración y las medidas de conservación más adecuadas en cada caso. Los informes técnicos han determinado las pautas concretas de intervención, que pretenden ser respetuosas con la integridad material y estética de cada obra.

En pleno centro de la capital

El Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana ocupa 4.200 metros cuadrados distribuidos en tres niveles escalonados y carece de cerramiento, lo que ha permitido que sus piezas puedan ser contempladas libremente desde su apertura. Esta característica ha hecho necesaria su conservación periódica, tanto para garantizar su integridad como para preservar su visibilidad.

En el primer nivel escalonado, el gran muro de contención de la calle de Serrano se encuentra cubierto por una cascada de láminas de agua, diseñada por Eusebio Sempere a base de módulos de hormigón blanco, con formas onduladas, que originan efectos de luz y movimiento.

El segundo sector está presidido por el mural de Gerardo Rueda, flanqueado por las esculturas de Palazuelo y Miró. Estas dos obras fueron las últimas en incorporarse al museo, a finales de 1978 y principios de 1979, respectivamente.

En el nivel inferior se encuentra la explanada que alberga tres de las piezas representativas de la colección: 'Lugar de Encuentros III' de Eduardo Chillida, más conocida como 'La sirena varada', que preside el centro del recinto, junto a las esculturas de Alberto Sánchez y Julio González.