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Medio Ambiente

Neom, la primera ciudad 100% tecnológica y libre de emisiones

Gemelos digitales, asistentes virtuales, una luna artificial, energía solar y coches voladores. Arabia Saudí sueña con construir en el desierto una urbe futurista para un millón de personas y experimentar con los avances más punteros. El objetivo: diversificar su modelo económico, ahora muy dependiente del petróleo

Neom, será la primera ciudad saudí que cuente con estatus especial en el que incluso las mujeres tendrán los mismos derechos que los hombres
Neom, será la primera ciudad saudí que cuente con estatus especial en el que incluso las mujeres tendrán los mismos derechos que los hombresLa RazónLa Razón

Una ciudad con más robots que personas. Esa es la propuesta que vio la luz hace un lustro y que está empezando a materializarse sobre las arenas del desierto. El planes ambicioso porque el heredero al trono de Arabia Saudí, Mohamed Bin Salman, espera que los primeros habitantes puedan poblar las calles de Neom en 2024. La nueva ciudad se está empezando a construir desde cero entre las fronteras de Arabia Saudí, Jordania y Egipto, y a lo largo de una línea de 170 km de largo.

El objetivo esquela urbe se alimente solo con energías renovables y respete hasta el 95% de la naturaleza sobre la que sea sienta .« Las dos primeras decisiones ya son poco sostenibles. Primero, la forma geográfica. Diseñar en círculo permitiría tenerlo todo más cerca y accesible. Tampoco el hecho de que se vaya a excavar hasta 3-4 niveles por debajo del suelo resulta muy respetuoso. Este tipo de proyectos utópico han aparecido desde los tiempos de Marineti y los futuristas, pero veremos en qué queda», opina Manuel Pérez Romero, catedrático del IE Center for Sustainable Cities de la IE School of Architecture and Design. Es verdad que viendo el proyecto se hace evidente que, más que el medio ambiente, su piedra angular es la tecnología.

De hecho, la ciudad recopila, como si fuera un catálogo, todas las aplicaciones técnicas disponibles a nivel mundial. Utilizará agua desalada, energía solar y eólica y las más novedosas materias primas, al mismo tiempo que apuesta por lana no tecnología, la realidad aumenta d y la virtual y la biotecnología. ¿Por qué? La respuesta hay que buscarla en el plan V is ion Saudí para 2030 del que forma parte la ciudad. Se trata de una hoja de ruta anunciada por el gobierno saudí en 2016 con el que se pretende diversificarla economía más allá del petróleo (del oro negro depende hasta el 80% de sus ingresos). «El país está apostando por todo lo puntero en el ámbito tecnológico y Neom es el campo de experimentación», opina a Jose Francisco Monserrat, investigador de la Universitat Politècnica de València y asesor de Banco Mundial en tecnología 5 G. Visto así es fácil entender porque los saudíes quieren convertir Neom en un hub para la creación de contenidos audiovisuales o que estén interesados en los desarrollos de las llamadas smart cities. «Están trabajando con una empresa de agua de Valencia para sensorizar las canalizaciones y que no se pierda ni una gota», apunta Montserrat.

Las smart cities consideran el entorno como un lugar interactivo en el que, gracias a la instalación de sensores, se puede controlar todo a distancia. Por ejemplo, se puede gestionar el tráfico en tiempo real; se pueden encender o apagar las luces cuando se detecte la presencia de algún ciudadano en la calle, y programar el envío de los camiones de la basura solo cuando los cubos están llenos. En este sentido, las autoridades del país van dando pasos para materializar Neom. Recientemente, han anunciado un contrato de servicios en la nube con el gigante Oracle y «el mes pasado, se convocaron licitaciones para la construcción de 31 km de túneles como parte de The Line», explica la publicación Trade Arabia.

La ciudad quiere aparcar los coches de manera definitiva y en el diseño se apuesta por soluciones de movilidad basados en la alta velocidad y en los coches autónomos, de forma que los desplazamientos más largos no supongan más de 20 minutos. Eso sí, de momento no se especifica si se va a apostar por taxis voladores o drones o por trenes de levitación magnética como los que ya usan en Japón o Corea del Sur o por otros conceptos como el Hyperloop.« Es verdad que hasta ahora las ciudades se han diseñado para los coches, pero hacerlos desaparecer del todo o enterrarlos bajo la arena no parece una buena idea. Por eso, para solucionar los problemas de movilidad han surgido conceptos como el de la ciudad de los 15 minutos que se quiere desarrollar en París, donde todo está a mano y los espacios tienen usos híbridos », opina Romero.

Metaverso

En cuanto al grado de desarrollo de estas tecnologías hay que aclarar que los coches voladores ya son una realidad en China, donde aeronaves no tripuladas transportan hasta 220 kilos de peso por el aire. Respecto al Hyper lo op sigue siendo una promesa desde que 2013 Elon Musk publicara el documento base de este concepto de tren de alta velocidad. A día de hoy de este sistema de levitación magnética en vacío no hay más que algún prototipo en el mundo.También se han hecho contadas pruebas reales, como la llevada a cabo en un túnel de 500 metros en el desierto de Nevada. Transportó a dos pasajeros durante 15 segundos a una velocidad máxima de 160 km/ h, muy por debajo de sus prometidos 1.200 km/h.

Mucho antes de que Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, anunciara la transformación de su empresa y la apuesta por el metaverso digital, los promotores de Neom ya contaban con integrar el mundo virtual entre los fronteras físicas de esta nueva ciudad. De hecho, entre sus ideas está la de apostar por un sistema de salud que permita alargar la vida de los ciudadanos gracias a teleasistencia basada en IA y al desarrollo de gemelos digitales para cada residente. Cada casa dispondrá de un sistema de diagnóstico integrado, que se funcionaría gracias a la recogida de parámetros de salud desde sensores instalados por todas partes, hasta en los cepillos de dientes. Además, esta especie de asistente de salud virtual dará lugar a un gemelo digital, un avatar en línea que cuente con los mismos datos biométricos del dueño, información sobre sus hábitos diarios y hasta su historial médico. «Los gemelos digitales ya existen el mercado. Se utilizan, por ejemplo, en los videojuegos. En el caso de Neom, el metaverso será parte de la ciudad», matiza Monserrat.

En diferentes medios (como The Wall Street Journal que ha revelado parte del secreto proyecto saudí) se pueden encontrar más tecnologías punteras aplicadas a esta ciudad futurista: «Un sistema operativo, un poco como el de su teléfono inteligente, controlará la ciudad. Apodado NEOS, impulsará cosas como la tecnología autónoma y la personalización.Los humano id es se utilizarán en lugares como los mostrador es de conserjería de los hoteles, pero no serán simplemente robots.

Serán puertas de entrada a verdaderos especialistas humanos », explica por ejemplo, la revista Wired. Pero es que además, los pro motores también han declarado su intención de instalar una luna artificial o convertir la zona en área protegida dedicada a la conservación y reintroducción de especies en peligro de extinción… En fin un catálogo de soluciones y buenas intenciones que habrá que ver en qué quedan, porque el gasto estimado no es baladí. La inversión estimada para hacer realidad este proyecto alcanzaría los 500.000 millones de dólares aunque se crearán, según sus promotores, 380.000 trabajos.

Otra cosa que está por ver es la cantidad de habitantes que logran atraer. En teoría Neom está diseñada para albergar un millón de habitantes para 2025, pero en este tipo de proyectos anunciados a bombo y platillo, hay algunos fracasos que no hay que olvidar. Por ejemplo, a Songdo, la ciudad construida en Corea del Sur como paradigma tecnológico y medioambiental se la ha llegado a conocer como la ciudad en la que nadie quiere vivir. En algunos medios internacionales como laBBC la han bautizado como Songberia, mezcla de Songdo y Siberia.

La urbe flotante

La ONU, preocupada por el aumento de la población y por los efectos del cambio climático, cuenta con un programa específico para las ciudades del futuro. En 2019 reunió a académicos, diseñadores y empresarios en su sede de Nueva York para analizar si, por ejemplo, las urbes flotantes podrían ser una solución viable a desafíos como el aumento del nivel del mar y la falta de viviendas asequibles. Y es que se calcula que cerca del 50 % de las personas viven en áreas costeras: dos de cada cinco personas viven a menos de 100 km de la costa y uno de cada diez vive en zonas costeras a menos de 10 m sobre el nivel del mar. «El aumento del mar y el cambio climático puede provocar que el 90 % de las ciudades más grandes del mundo estén expuestas al aumento de los mares para 2050», explica la ONU. En esa reunión estuvo presente el Instituto de Tecnología de Massachusetts o la empresa Oceanix, una firma que busca construir las estructuras flotantes. El arquitecto líder Bjarke Ingels explicó el diseño de las ciudades flotantes, que albergarían a 10,000 personas, podrían soportar condiciones climáticas severas y producirían su propia energía y alimentos y manejarían el agua y la eliminación de desechos. Una especie de país alternativo pensado y construido para dar respuesta a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.