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Hidrógeno verde

Caminando hacia la economía de hidrógeno

El pasado mes de febrero, Huelva fue el escenario del I Congreso Nacional de Hidrógeno Verde, que ha reunido a asociaciones de 11 países y que ha sentado las bases del mundo energético que está por venir

Caminando hacia la economía de hidrógeno
Caminando hacia la economía de hidrógenoMichael Benz - Unsplash

Con el fin de sentar los cimientos de la economía mundial del futuro y apostar por recursos energéticos alternativos, se celebró en Huelva la primera edición del Congreso Nacional de Hidrógeno Verde.

Este encuentro, que tuvo lugar entre el 7 y el 9 de febrero, reunió a las asociaciones de hidrógeno de Alemania, Irlanda, Rumanía, Portugal, México, Costa Rica, Australia, Chile, Corea, Canadá y España. Los asistentes pudieron disfrutar de ponencias y conferencias técnicas, presentaciones de empresas del sector y de un espacio perfecto para el networking con más de 900 participantes.

A lo largo de estas jornadas, se pudo palpar el creciente compromiso por reconocer los distintos proyectos e iniciativas que hay en la actualidad en lo relativo al hidrógeno y en la importancia de estimular este recurso verde y limpio para una economía más responsable.

Para ello, se contó con la industria química, el sector eléctrico, empresas relacionadas con la movilidad y con otras empresas para las que el hidrógeno pueda resultar de interés.

El hidrógeno, cada vez más presente en las cumbres internacionales

El congreso recogía el testigo de otras cumbres más populares, como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que tuvo lugar en Dubái y que ya apuntó a esta energía como una de las más relevantes del momento.

En la COP 28, representantes de hasta 37 gobiernos apoyaron el "Reconocimiento Mutuo de Esquemas de Certificación para el Hidrógeno Renovable y de Bajo Carbono y sus Derivados". Con este marco, buscaban colaborar en el reconocimiento recíproco de sus respectivos sistemas de certificación para el hidrógeno y sus derivados con emisiones de carbono.

Ejemplo de ello fueron las metodologías ISO, que estandarizan la evaluación de las emisiones de gases de efecto invernadero y que impulsan la colaboración público-privada en los corredores internacionales de hidrógeno.