El PP asegura que es «el único partido» que apoya a unos agricultores en pie de guerra

Mientras que las organizaciones agrarias murcianas continúan movilizándose para organizar la protesta prevista para el próximo día 21 de febrero en Murcia, los partidos políticos mayoritarios toman posiciones con respecto a su postura. Tanto el PP como el PSRM-PSOE se acercan al sector para transmitirle un apoyo que los productores piden que se convierta en hechos concretos, al tiempo que cruzaban acusaciones sobre quienes son los culpables de la situación que hoy se vive en el campo.

Ayer, desde el Partido Popular, su secretario ejecutivo de Agricultura, Jesús Cano, metía el dedo en la llaga del Gobierno central al que responsabilizaba de haber llevado al sector «a una situación insostenible por su dejadez». Y afirmaba que los productores agrarios necesitan «menos declaraciones de intenciones y más medidas concretas que resuelvan sus problemas».

Cano contestaba así a las declaraciones realizadas unas horas ante desde el PSRM, quien a través del diputado Juan Luis Soto, defendió el trabajo que está realizando el ministro de Agricultura, Luis Planes y resaltó las medidas que va a tomar el Gobierno del país destinadas, según dijo, a erradicar prácticas desleales, prohibir la venta a pérdidas, dotar de información a los consumidores sobre la formación de los precios que incluya el coste de producción de los alimentos y publicitar las sanciones en los supuestos de incumplimiento de la norma.

El diputado socialista quiso también ponerse al lado de los agricultores de los que dijo, «comparte, comprende y es sensible a sus demandas». Y acusó al Gobierno regional, al PP, a Ciudadanos y a Vox de «falta de lealtad, de sentido de estado y de región», y muy especialmente al presidente del Ejecutivo, Fernando López Miras, al que pidió que lleve a cabo medidas en la misma línea que el Gobierno de España.

Soto aseguró que esta es la primera vez que un ministro de Agricultura moviliza a todos los agentes implicados en la cadena alimentaria «en búsqueda de soluciones dialogadas». En referencia a la mesa de diálogo agrario entre el Gobierno y las asociaciones profesionales agrarias, el diputado señaló que se ha decidido establecer un método de trabajo y un calendario con la intención de generar un «espacio de diálogo sincero».

Por su parte, el diputado del PP insistió en que no se puede pedir lealtad y apoyo cuando «los primeros desleales» con los agricultores son el vicepresidente Pablo Iglesias y la ministra de Empleo, Yolanda Díaz, «que fulminan» a las organizaciones agrarias de la reunión del sector agrario, al recordar que las convocaron y luego les prohibieron acudir.