Opinión

Juguetes desiguales

Ahora que ya comienza la compra, me recreo buscando en internet los juguetes más vendidos. Qué alegría, no son los juguetes bélicos; ni pistolas, ni metralletas, ni tanques... Parece ser que los niños ya no quieren ser soldados. Pero, ¿qué piden ellos? El número uno: un lego technic “golpea”, sí, han leído bien, golpea. Número dos: LEGO Speed Champions. Equipo de Formula One. Para campeones, sin duda. Luego ya llegan los superhéroes, los robots, los disfraces... Hay uno que me resulta gracioso, reza así: Disfraz hinchable con diseño de hombre desnudo levantado a una persona. Como ven, la cosa no da para mucho en cuanto a sensibilidad y pensamiento. El modelo ya no va de matones, sino de chicos fuertotes, con megacoches y poderes. Pobres varoncitos míos, educados aún para competir y mandar como sea. Luego nos extraña que usen los puños contra las mujeres. Pero, ¿y ellas? qué juguetes traen a las niñas. En primer lugar veo una muñeca llamada “de cerveza” que es una auténtica contrahecha. Eso sí, muy rubia, camiseta violeta, pantaloncito mínimo y corazón al pecho. No muy lejos está la Barbie de mil peinados, con su aspecto de putita de siempre. Y en tercer lugar el horno mágico. Desolador. Mucho más abajo en el ranking vemos ya puzles, juguetes educativos, mochilas... Y muy interesante, supermercados y carritos para la compra. Ahí sí que dibujan a hombrecitos tirando del carro, menudo progreso. El kit de limpieza sigue ocupando un lugar destacado. A mi sobrina de dos años se lo regalaron por su cumple. Lía ni lo miró. Su primo Yago agarró escoba y recogedor y se dedicó a barrer encantado el parque de bolas. Con esos añitos aún somos libres e iguales.