El Gobierno de Pedro Sánchez

La opinión de Francisco Marhuenda: “El telepredicador Sánchez”

Un 24 horas de información presidencial, con un espacio diario que podrían denominar como «Mensaje del Presidente a la Nación», sería muy atinado en los aciagos tiempos que nos toca vivir

Desde el sábado al mediodía duermo tranquilo. La aparición del presidente del Gobierno en su habitual rueda de prensa me produce un efecto muy placentero y creo que la administradora general, extraordinaria, única y sublime de RTVE, Rosa María Mateo, debería rebautizar uno de los canales y denominarlo Tele Sánchez (TS). Hay que tener en cuenta que serviría para cumplir la previsión legal de servicio público.

Un 24 horas de información presidencial, con un espacio diario que podrían denominar como «Mensaje del Presidente a la Nación», sería muy atinado en los aciagos tiempos que nos toca vivir. La secretaría de Estado de Comunicación se podría encargar de aportar los valiosos contenidos y los españoles estaríamos, por fin, realmente informados. Es una iniciativa muy adecuada en estos tiempos de las fake news.

Nada mejor que el Gobierno y sus organismos puedan contar la verdad revelada, hacer tertulias realmente objetivas y dejar las críticas para la caverna mediática que no entiende o no quiere entender los hercúleos esfuerzos que se están haciendo desde La Moncloa y la mini Moncloa.

Ahora ya tengo claro que el Gobierno lo ha hecho bien, pero que muy bien, e incluso los niños se lavan las manos porque hasta ahora no lo hacían lo suficiente. Hemos sido unos padres realmente descuidados y tenemos que hacer propósito de enmienda. Hace años que tengo claro, lo he dicho algunas veces en La Sexta Noche, que los españoles vivíamos los tiempos de Atapuerca hasta que llegaron los socialistas en 1982.

Por fin, el progreso se instaló en nuestras vidas. Fue el triunfo de lo público en la educación, la sanidad, las pensiones…. en definitiva, el Estado del Bienestar. Es una verdad universalmente conocida que la derecha es insensible socialmente, por eso me encanta que los pijo progres de las clases medias y altas nos rescaten de esos cavernícolas que son insensibles con los problemas sociales.

A la derecha, por lo visto, le gusta la pobreza, odia los avances sociales y no quiere que las clases trabajadoras se beneficien del ascensor social. Y, sobre todo, hay que pedir al presidente que alargue sus intervenciones de los sábados porque resultan demasiado breves y las extienda al resto de la semana. Muchas gracias querido y admirado Gobierno. De momento, ha entrado en razón y ha acabado con las ruedas de prensa con las preguntas seleccionadas.