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Molesta que a la portavoz de Podemos se la aluda como pareja de Pablo Iglesias. Un argentinismo lo resuelve: «Amigovia». Perverso sería lo del matrimonio Ceaucescu, y también Elena desempeñaba cargos comunistas. Lo de Perón y Evita queda a distancias galácticas, aunque el inventor del fascismo criollo fue gran manipulador de mujeres como nuestro Macho Alfa: Tania, Bescansa, Montero,... Irene Montero será un cerebrazo pero su encargo como telonera de la corrupción, con ademanes de petrolera de la Comuna, nos convenció de que la única corrupción en España, en Europa, el mundo y el Sistema Solar es la del PP, propietario, incluso, de la patente universal del gatuperio o estraperlo. Permitió al Timonel bajar el tono de voz y leernos una añosa guía de teléfonos con todos los números de la felicidad universal. Los programas políticos, como el papel, lo aguantan todo, y Felipe González sigue encorajinado por saber quién fue quien en su programa del 82 incluyó la creación de 800.000 puestos de trabajo en una legislatura, cuando lo que se logró fue la destrucción del mismo número de empleos. Para Iglesias la democracia es instrumental y desechable cuando tome los cielos por asalto, de ahí que use papel de fumar tratándose de Irán, Venezuela, el Califato o cualquier compadre del terror. No es malo el gañán: es el enésimo ferroviario de una nueva vía hacia un comunismo «low cost». El profesor Tamames se ha pasado la vida explicando la estructura económica de España y no siendo casta ni trama podría explicarle a Iglesias en tres tardes cuánto puede dar de sí este país antes de quebrar. Lenin tomó de Marx el concepto «cuanto peor, mejor», asumido por los populismos de cada madre y recordado por el presidente Rajoy. En paladino se trata de la vieja tramoya de armar una falsa distopía aborrecible ofreciendo a cambio una utopía inalcanzable pero edénica. Pero la almendra de la mocioncita reside en la expulsión del PP de las instituciones, algo que infecta a muchos militantes socialistas. España como problema deja de serlo cuando el centro-derecha español desaparezca, se exilie, se suicide, disolviendo el mito de las dos Españas en una sola radical-populista. Iglesias perfora el suelo de la Física. Ni la naturaleza ni los laboratorios pueden bajar la temperatura a menos 273,16º C. El Cero Absoluto. Este doctor en temas generales lo consigue.