Miguel Ors

Honor al Rayo y al árbitro

L28 Exprimir

Una representación española de la juventud, divino tesoro, del deporte la tenemos, cesárea y asombrosa, en el mundo de las motos. «La moto –me dijo una vez el fetiche Ángel Nieto– es amor a la velocidad sin alas. Las alas de la moto, bueno, son el piloto». Archivé la frase. Me maravillan los pilotos alados que se juegan valientemente la vida sobre dos ruedas. Como Pol Espargaró, 22 años, campeón del mundo en Moto2 desde ayer. «La moto –interpreta– me exprime a mí y yo exprimo a la moto, y qué bien nos entendemos los dos». ¿Será verdad que la juventud es la fiebre de la sinrazón sin una sola décima de fiebre de la razón?

–¡Si los políticos pilotasen la política como los pilotos las motos, qué formidable país sería España! ¿Por qué la política no pare pilotos de la talla de Espargaró, Márquez, Lorenzo, Pedrosa...?

Hay, sí, verdad en este juego de palabras de mi amigo Hernán San Pedro.

M29 Industria

La industria de toda la vida, la industria de la política, la industria de la televisión, la industria del fútbol.

–¿Qué es la globalización?

–La industrialización del globo: esto es la globalización.

Platini, el gurú de la UEFA, ha lanzado la idea, pensando en el Mundial que se celebrará en 2018 en Rusia con una fase final con 40 selecciones (32 hasta ahora).

–El fútbol está ya –piensa, sostiene, rumia– globalizado, luego globalicemos el Mundial a niveles de más dinero y de más televisión, el pozo de petróleo del fútbol.

¿Es o no industrializar todavía más la industria del fútbol?

M30 Error

La conciencia es el sentido común de la ética (religión) y el sentido común es la conciencia de la inteligencia. Me ratifico y no me arrepiento, mi querido –de verdad– Ángel María Villar. Si Del Bosque alinea a Diego Costa en el Mundial de Brasil, Brasil no verá en la Selección un adversario, sino un enemigo odiable. O sea: ¡todos contra España!

Cataluña dice que España le roba –¡mentiras de políticos miserables y repudiables democráticamente a los que, por falta de huevos con yemas, no se les aplica democráticamente de una vez por todas la Carta Magna– y Brasil nos tratará como si le hubiéramos robado a Diego Costa.

J31 Toma y daca

Lo del Barça era, sigue siendo, aminorado, el tiquitaca. Lo del Madrid contra el «valiente» Sevilla, un toma y daca.

–¡Fútbol-boxeo!, celebraba encantado un espectador.

Diez goles en 90 minutos es como un tsunami de goles. Puskas era «Cañoncito Pum». Cristiano es «Cañonazo Pum». Y Gareth Bale, «Bombazo Catapum».

–¡Qué trueno de delanteros!

Noche divertida. Para el Sevilla, claro es, no tanto. Pero el mérito del Sevilla es que aceptó «el cambio de golpes» sin amilanarse.

V1 Red Bull

Sólo 1-0 del Barça al Espanyol. Resultado magro. Y, pregunta: ¿qué le pasa a Messi, el Red Bull del equipo? Es noticia, y casi sorprendente, que Messi lleve encadenados en la Liga cuatro partidos sin morder al adversario: ni un gol. Sartre, tan pesimista, decía que el hombre es una pasión inútil: bueno, eso decía. La realidad es que el hombre es un ser multipasional y cíclico. Messi, últimamente, no hace goles, pero los preteje. El problema de Messi, en parte, es que los «fogoneros» Iniesta y Xavi, entre otros, piensan y trabajan más cansinamente.

S2 Orgullo

Pues es verdad, me dije, tras leer la pancarta desplegada en uno de los graderíos del estadio vallecano: «El Rayo es un orgullo con unos cojones como puños». Cojonudo, en efecto, su partido: posesión del balón, coraje ofensivo, amor propio... Ganó, cómo no, el Madrid, pero gracias –sólo a eso– al poder de sus «megagemas» (Cristiano, Bale, Benzema...).

Álvarez Izquierdo, cojonudo también, también con un par de matrícula de honor y premio extraordinario. Pitó dos penaltis –lo fueron– y no a favor del Real Madrid.

¿Por qué no castigan los árbitros los muchos penaltis que se cuecen en todos los partidos? Agarrar y extorsionar antirreglamentariamente dentro del área es penalti siempre. Siempre, siempre.