Los de la Logse

Mientras el último infome Pisa sigue dejando en evidencia los agujeros negros educativos de nuestro país, la izquierda, con el PSOE a la cabeza, sigue dándole cera al Gobierno y al ministro Wert por la nueva ley de educación, la primera que un gobierno del PP se ha atrevido a poner en marcha en su totalidad. Los socialistas siguen convencidos de que la Logse fue un gran logro a pesar de que las carencias de quienes la han sufrido siguen siendo espectaculares. Hace unos días se hizo público un estudio según el cual en la universidad española sólo hay un ordenador por cada quince alumnos. El citado estudio llevaba la firma del Consejo de Rectores que, en su mayoría, han aprovechado la autonomía universitaria para gestionar desastrosamene los recursos disponibles. El trabajo carga las tintas en los recortes para justificar el fiasco de la enseñanza pública superior, y así se reflejaba en distintos reportajes que se emitieron en varias televisiones de ámbito nacional. En uno de ellos aparecía un alumno que se lamentaba amargamente de la falta de ordenadores en su facultad lo que, según este joven sobradamente no preparado, provoca que «te se hace más lento trabajar». Este nuevo Castelar es un ejemplo, quizá anecdótico pero significativo, de las carencias de quienes han padecido los planes de estudio-adoctrinamiento que el PSOE puso en marcha nada más llegar al poder en los primeros años ochenta y con los que han estudiado varias generaciones. Lo de estudiado es un decir, poque quienes hemos tenido contacto con la Universidad en estos años hemos visto de todo menos una preparación adecuada. La incultura general que acompaña a un número muy significativo de nuestros universitarios es la consecuencia de una enseñanza escasamente reglada y de una laxitud tremenda a la hora de exigir esfuerzo y trabajo a los alumnos. No sé si la Lomce podrá paliar esto en el futuro, sobre todo si se produjera un cambio de gobierno prematuro.