Tres en Raya

Tras su última cita, en el mes de julio en Sevilla, la Junta Directiva Nacional del PP vuelve a la sede central de la calle Génova. Al máximo órgano entre congresos, desde la refundación acometida por Aznar, hace ahora veintitrés años, también en la capital hispalense, se le conoce como el «Cuarto Poder». Porque entre sus seiscientos miembros figuran ministros del Gobierno, la cúpula del partido, diputados, senadores, presidentes autonómicos... Un auténtico cónclave que Rajoy ha decidido reunir bajo un mensaje de unidad y solidez. Gran expectación ante una importante cita que gira alrededor de tres parámetros: reformas económicas frente a la crisis, política institucional con la sombra del soberanismo catalán, y el «caso Bárcenas», un polvorín que sacude los cimientos del partido, máxime cuando el ex tesorero del PP y jefe de Bárcenas, Álvaro Lapuerta, ha declarado ante el juez Ruz y es un histórico miembro de la Junta Directiva, a propuesta directa del presidente. Aunque no se prevén disensiones, algunos altos cargos del partido han de superar varias «pruebas de fuego». Hete aquí a la gran dama de Génova trece, Cospedal, con un cierto sector interno adverso. Y al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en su difícil equilibrio contra el déficit, y la oposición de «barones» y lideresas, que han hecho bien sus deberes. Ignacio González, Rudi, Bauzá, Sanz, Herrera y Feijóo, y pueden presumir de una excelente gestión en sus territorios, lo que les permite criticar una conducta flexible hacia Cataluña. Tradicionalmente, la Junta Directiva Nacional es la que también ofrece voz a los alcaldes y dirigentes provinciales, muy relevante en el momento actual con la Ley de Administración Local en ciernes. Una cita clave que, en palabras de un veterano, Rajoy manejará como un «Tres en raya». Es decir, en un perfecto juego de equilibrios, fiel a su estilo y sin alterar su hoja de ruta.