El discurso más esperado de su Majestad

Esta Nochebuena, en la mayoría de los hogares de España se escuchará con especial atención la tradicional alocución navideña de Su Majestad, que, sin duda, será un referente para una sociedad preocupada por la difícil situación política de Cataluña, pero que está convencida de que tiene en Don Felipe VI el mejor baluarte de la convivencia pacífica y de la soberanía nacional. Si desde su llegada a la Jefatura del Estado el Rey nunca ha eludido los problemas y las dificultades que atraviesan sus conciudadanos, tampoco se ha limitado a mera exposición de la realidad y a la expresión de deseos. Al contrario, Su Majestad siempre ha procurado aportar símbolos que reforzaran la cohesión nacional y la confianza de los españoles en su bien probada capacidad para superar las mayores dificultades. Así, en 2015, Don Felipe eligió como escenario de su discurso el imponente Salón del Trono del Palacio Real para recordarnos la grandeza de una nación multisecular, forjada en la unidad y el esfuerzo colectivo, pero que atravesaba un momento grave de incertidumbre política tras la celebración de unas elecciones que, a la postre, se consumirían en una legislatura fallida. La crisis se superó, como se superará la actual, siempre desde el respeto al orden constitucional y a las reglas de la democracia, que son los instrumentos que han dado el mejor período de libertad y prosperidad a los españoles y que Don Felipe VI encarna desde la Jefatura del Estado.