España queda fuera del reparto de la UE de 1,5 millones de mascarillas para sanitarios porque no lo solicitó

A pesar de que la escasez de mascarillas ha sido la tónica dominante en España al igual que en otros países europeos, el Gobierno de Pedro Sánchez no solicitó al ejecutivo comunitario participar del mecanismo de compra conjunta, puesto en marcha para hacer frente a esta crisis sanitaria sin precedentes. Esto significa que nuestro país no forma parte del grupo de 18 Estados que recibirán un total de 1,5 millones de unidades destinadas a proteger al personal sanitario.

Este material se distribuirá entre Austria, Polonia, Malta, Chipre, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Países Bajos, Francia, Italia, Croacia, Eslovenia, Grecia, Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia y Hungría. Reino Unido, a pesar de haber abandonado el club comunitario, también se beneficiará de esta iniciativa. Con este mecanismo de licitación conjunta y voluntaria entre los países europeos, el ejecutivo comunitario ha intentado hacer olvidar los primeros episodios de insolidaridad europea y tener una mayor capacidad de negociación con los proveedores, algo especialmente importante en momentos de escasez y de la multiplicación de material médico defectuoso.

“Estamos haciendo todo lo posible para ayudar a los Estados miembros a proveer equipos de protección a los trabajadores sanitarios en primera línea. Ellos son los héroes de la Europa actual Esto es solidaridad europea en acción”, ha expresado la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, en un comunicado.

Fuentes comunitarias explican que, sin embargo, nuestro país sí que ha solicitado formar parte de la reserva europea de material médico, mecanismo bautizado como RescEU, que también se ha puesto en marcha para hacer frente a esta pandemia. De hecho, la semana pasada España recibió mascarillas protectoras al igual que otros países como España e Italia.

La primera respuesta al avance del coronavirus estuvo marcada por el sálvese quién pueda, dentro del club europeo. Francia y Alemania incluso prohibieron exportar este material cuando Italia había solicitado ayuda a sus socios europeos, tras convertirse en el epicentro europeo del virus. Este egoísmo propició que la propia presidenta del ejecutivo europeo se disculpase ante los italianos en el hemiciclo europeo.”Es cierto que nadie estaba realmente preparado para esto, pero también es cierto que hubo demasiadas ausencias cuando Italia necesitó ayuda en los primeros momentos", aseguró la política alemana para después pedir perdón “de todo corazón”.

La dependencia en la producción de material médico de terceros países fuera del bloque comunitario y el caos en la gestión de la crisis ante la falta de competencias de la capital comunitaria han llevado a una reflexión en los pasillos de las instituciones europeas. “A partir de ahora la salud debe ser algo en lo que la UE tenga competencias para actuar, de igual manera que la salud se ha convertido a nivel mundial en un problema de seguridad, a nivel de la UE es una cuestión de integración", aseguró este pasado jueves el máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell en un encuentro con los corresponsales españoles en Bruselas, poniendo especial énfasis en mecanismos para asegurar la seguridad del suministro de material médico, al igual que sucede con otros bienes de primera necesidad.

Tras conocerse que España no pidió participar de este mecanismo de licitación pública, la jefa de filas del Partido Popular en la Eurocámara Dolors Montserrat ha pedido explicaciones al Gobierno de Pedro Sánchez. “España no recibirá ni una sola mascarilla del millón y medio que repartirá la Comisión Europea para los sanitarios. Y todo porque el Gobierno no las solicitó, como si no nos sobraran. Inadmisible. El Gobierno debe dar explicaciones inmediatamente”, inquirió vía twitter.