«Cada experiencia laboral iba acompañada del deseo de plasmar en relatos lo que el entorno me regalaba»

«Tengo dudas sobre las instalaciones donde se fabrica la vacuna rusa»

Carlos Lens es ex subdirector general de Calidad del Medicamento del Ministerio de Sanidad y escritor

-Relatos del Sol Naciente» es ya su noveno libro. ¿Qué le inspira a escribir cada uno?

-Amo la literatura desde que tengo recuerdos. Mis primeros pasos en la narrativa datan de la adolescencia. Trabajé desde muy joven y cada nueva experiencia laboral iba acompañada del deseo de plasmar en relatos lo que el entorno me regalaba. Tardé en decidirme, en parte por los estudios continuados y la intensa actividad profesional, pero al tener en las manos mi opera prima lamenté no haberlo hecho antes. Cada libro responde a un impulso interior. Las sensaciones y experiencias vividas han generado ondas de energía que pugnaban por liberarse en forma de relatos. No importaba si era la Medicina, la Historia o la intensidad de las emociones. El fenómeno ha sido siempre el mismo.

-En esta ocasión escribe sobre Japón. ¿Por qué?

-Entre 1978 y 1981 viajé con frecuencia allí por razones profesionales. Era mi primer trabajo en el sector farmacéutico y constituyó una gran experiencia, que me ha acompañado siempre. Es una sociedad cuyos valores y cultura me subyugaron. Hoy el mundo está muy globalizado pero hace 40 años convivían modernidad y tradición y tuve la fortuna de impregnarme de ese ambiente.

-Ha estado muy ligado al mundo de la Sanidad al más alto nivel. ¿Qué cree que se podría haber mejorado de la gestión de la crisis?

-El primer desacierto fue desoír a las autoridades sanitarias internacionales, especialmente a la OMS. El 8/3/2020 no necesita explicación, con el ministro de Sanidad reconociendo la gravedad de la pandemia tras haberse permitido numerosas concentraciones públicas. Fue una reacción distónica y extemporánea, similar a lo vivido en navidades, en las que se bajó la guardia. Después vino un confinamiento excesivamente estricto y de un día para otro. Deberíamos haber reconocido el problema ya en enero e ir diseñando e implementando medidas de control epidemiológico en vez de ir a un cierre drástico y sin preparación. En lo que a mi sector concierne, los gestores sanitarios no previeron los cambios en la demanda de insumos sanitarios como mascarillas, respiradores, equipos de protección y numerosos medicamentos. Si se hubiera planificado desde enero habríamos evitado muchos contagios y no pocos fallecimientos.

-Tras el hito logrado con las vacunas ha venido una polémica sobre el cumplimiento de los contratos de las farmacéuticas. ¿Qué opina al respecto?

-La Comisión Europea llevaba ya 10 años analizando procedimientos de compra conjunta de medicamentos y, gracias a ello, se llegó a acuerdos con empresas farmacéuticas capaces de desarrollar vacunas en tiempo récord. Algunas de estas empresas han visto reforzada su capacidad financiera merced a estos contratos y logrado desarrollar vacunas efectivas y seguras. Esta es la parte buena. La industria innovadora se fundamenta en la protección de datos, por lo que no ha de extrañar que buena parte de los contratos hayan permanecido bajo llave hasta ahora. Va en la cultura empresarial de quienes aportan innovaciones, sean sanitarias o de otro tipo. Por otra parte, los contratos se renegocian en no pocas ocasiones y, no olvidemos, no hay capacidad suficiente en el mundo para producir 3.000 millones de vacunas al año, por lo que las tensiones oferta-demanda son inevitables.

-También se ha hablado de la eliminación de las patentes de las mismas...

-Cabe recordar que desde 1998 existen acuerdos casi mundiales sobre la protección de la propiedad intelectual, incluidas las patentes. Los ordenamientos jurídicos derivados de estos acuerdos ADPIC recogen excepciones a los derechos de patente y, por tanto, podrían emprenderse los mecanismos previstos hace más de 20 años si quienes deben aplicarlos lo consideran necesario y se sigue fielmente las leyes. Si no se ha hecho será porque no ha habido voluntad política o porque no se daban las circunstancias previstas en los tratados.

-¿Por qué en la Unión Europa (UE) no están disponibles vacunas que sí se están administrando en otros países?

-Únicamente conozco los casos de Rusia y China. Para que un medicamento pueda ser usado en la UE debe ser eficaz y seguro, y tener calidad suficiente para cumplir los requisitos exigidos por la Agencia Europea del Medicamento. Haciendo un ejercicio de fe, asumo que la vacuna rusa es eficaz y sus efectos adversos no impiden su administración, pero tengo dudas sobre las instalaciones productivas donde se fabrica. Si esas plantas no cumplen las normas de correcta fabricación de la UE, sus productos no pueden circular por los estados miembros. En cuanto a la china, existen limitaciones a la capacidad productiva y las empresas implicadas han buscado capacidad adicional en la UE. El problema es que no se construye y valida una planta de vacunas virales en meses.