Opinión

La importancia de la cirugía vascular

El Servicio de Cirugía Vascular de Santiago estrenó en marzo el centro de simulación clínica con un programa de entrenamiento avanzado en técnica endovascular
El Servicio de Cirugía Vascular de Santiago estrenó en marzo el centro de simulación clínica con un programa de entrenamiento avanzado en técnica endovascularÁREA SANITARIA DE SANTIAGO

Un estudio publicado en «JAMA Internal Medicine» ha demostrado que los cirujanos vasculares trabajan más horas que cualquier otra especialidad, en un análisis de las horas anuales de trabajo de los médicos realizadas entre 41 ramas.

La diferencia entre la cirugía vascular y el competidor más cercano, la medicina ejercida en cuidados intensivos, fue de unas 200 horas al año.

El valor del cirujano vascular moderno para el sistema de salud demuestra que la cirugía vascular es un servicio que amplía el alcance de los tipos de procedimientos que puede ofrecer un sistema de salud.

Lo que muchos administradores de hospitales tal vez no vean ni aprecien es su papel en la creación de un entorno de quirófano seguro y cómo apoyamos la labor diaria a otros servicios. Otros estudios han demostrado que «básicamente, todas las especialidades necesitarán ayuda de cirugía vascular en el quirófano» y concluyen que somos los «bomberos del quirófano» al referirse al tipo de procedimientos que requieren asistencia vascular, algunos que probablemente resultarían en la muerte del paciente sin nuestra presencia.

El mensaje es que la cirugía vascular es tan importante como la anestesia para proporcionar un quirófano seguro.

Hay diferentes tipos de asistencia en muchos casos que requieren reconstrucción vascular, por ejemplo, en la ayuda a un cirujano de cáncer a extraer un tumor que compromete a la arteria ilíaca.

Por otro lado, la práctica vascular debe mantener una asistencia en clínica ambulatoria completa y un programa completo de cirugías electivas, pero las frecuentes emergencias de otras especialidades interrumpen esta práctica, lo que resulta en que nuestros pacientes a menudo quedan insatisfechos y enojados por los retrasos generados.

Las administraciones de los centros hospitalarios a menudo carecen de una valoración adecuada del alcance que tiene la cirugía vascular y el impacto en la seguridad del paciente. Sufrimos una crisis de marca, y necesitamos involucrarnos con el liderazgo del hospital, algo que no hemos hecho tan bien como otras especialidades.