Salud

Los 8 consejos científicos que pueden alargar tu vida 24 años más

Incluso los cambios más pequeños a partir de los 40 o los 60 años puede tener efectos beneficiosos a largo plazo, según un nuevo estudio

Mujer anciana consejos hábitos para vivir más
LongevidadFreepik

¿Quién no querría vivir hasta 24 años más? Para que esto ocurra, sólo habría que adoptar ocho consejos de estilo de vida saludable a los 40 años, según un nuevo estudio inédito que analiza datos de 700.000 veteranos estadounidenses.

En él se afirma que las personas que adoptan estos ocho hábitos en la mediana edad pueden esperar vivir mucho más tiempo que las que tienen pocos o ninguno. Según los resultados, presentados en Nutrition 2023, la reunión anual de la Sociedad Americana de Nutrición, se prevé que los hombres que cumplan los ocho hábitos a los 40 años vivirán una media de 24 años más que los que no cumplan ninguno de ellos. En el caso de las mujeres, tener los ocho factores saludables se asoció con una predicción de 21 años adicionales de vida.

Pero, ¿qué pasa si se empieza a los 50 años? No hay problema, todavía podrías prolongar tu vida hasta 21 años, según el estudio. ¿Y a los 60? Seguirás ganando casi 18 años si adoptas los ocho hábitos saludables. "Hay un periodo de 20 años en el que se pueden hacer estos cambios, de los 40 a los 60, tanto gradualmente como de golpe", explica Xuan-Mai Nguyen, autora principal del estudio y especialista en ciencias de la salud del Programa del Millón de Veteranos del Boston Healthcare System.

"Cuanto antes mejor, pero aunque sólo se haga un pequeño cambio a los 40, 50 o 60 años, sigue siendo beneficioso", afirma. "También hicimos un análisis para ver si eliminábamos a las personas con diabetes tipo 2, colesterol alto, ictus, cáncer y similares, cambiaba el resultado. Y la verdad es que no", dijo. "Así que, aún con enfermedades crónicas, hacer cambios sigue siendo útil", detalla.

Cumplir los ocho requisitos para vivir más "tuvo un efecto sinérgico, una especie de impulso añadido para alargar la vida, pero cualquier pequeño cambio marcó la diferencia", afirma Nguyen. Añadir un solo comportamiento saludable a la vida de un hombre de 40 años le proporcionaba 4,5 años más de vida. Añadir un segundo conducía a siete años más, mientras que adoptar tres hábitos prolongaba la vida en 8,6 años. Seguir todos, sumaba casi un cuarto de siglo de vida extra.

Las mujeres también experimentaron "grandes saltos en su esperanza de vida", según Nguyen, aunque las cifras no coincidían con las de los hombres. Adoptar un solo comportamiento saludable añadía 3,5 años a la vida de una mujer, mientras que dos añadían ocho años, tres 12,6 años y adoptar todos los hábitos saludables prolongaba la vida de una mujer en 22,6 años.

¿Y cuáles son esos hábitos saludables mágicos? Nada que no hayas oído antes: haz ejercicio, sigue una dieta sana, reduce el estrés, duerme bien y fomenta las relaciones sociales positivas. Por otro lado, no fumes, no bebas demasiado y no te vuelvas adicto a los opiáceos. "Esto no está fuera de nuestro alcance, en realidad es algo factible para la población general", apunta Nguyen.

¿Qué habito suma más años de vida?

Además, el estudio fue capaz de comparar los ocho comportamientos de estilo de vida para ver cuál proporcionaba el mayor impulso en la longevidad y los colocó en una clasificación. El número uno de la lista es el ejercicio. Según Nguyen, añadir ese comportamiento saludable produjo una disminución del 46% en el riesgo de muerte por cualquier causa en comparación con quienes no lo cumplían.

"Analizamos si practicaban una actividad ligera, moderada o vigorosa en comparación con no hacer nada y quedarse sentado en el sofá", dijo Nguyen. "Las personas que vivieron más hicieron 7,5 horas metabólicas equivalentes de ejercicio a la semana. Para que te hagas una idea, si puedes subir un tramo de escaleras sin perder el aliento, eso son cuatro minutos de las 7,5". Por ello, las actividades más vigorosas parecen mejores.

No volverse adicto a los opiáceos fue el segundo factor que más contribuyó a una vida más larga, reduciendo el riesgo de muerte prematura en un 38%, según el estudio. En tercera posición, se sitúa no haber consumido nunca tabaco, que reduce el riesgo de muerte en un 29%, según el estudio. Si una persona había sido fumadora pero ya no, no contaba: "Lo hicimos para que fuera lo más estricto posible", dijo Nguyen. Sin embargo, los expertos afirman que dejar de fumar en cualquier momento de la vida aporta importantes beneficios para la salud.

En el puesto cuarto, el estudio concluye que controlar el estrés reduce la mortalidad prematura en un 22%. Le sigue adoptar una dieta basada en plantas aumentaría en un 21% las probabilidades de vivir más tiempo. Pero eso no significa que tengas que ser vegetariano o vegano. La clave está en seguir un plan saludable, como la dieta mediterránea, repleta de cereales integrales y verduras de hoja verde.

En sexta posición se recomienda evitar las borracheras o, según el estudio, tomar más de cuatro bebidas alcohólicas al día. Este hábito de vida saludable que reduce el riesgo de muerte en un 19%, según Nguyen. Dormir bien, es decir, entre siete y nueve horas por noche sin padecer insomnio, reduce la mortalidad prematura por cualquier causa en un 18%.

Por último, estar rodeado de relaciones sociales positivas favorece la longevidad en un 5%, según el estudio. "Puede parecer poco, pero sigue siendo una disminución en términos de mortalidad por todas las causas", subraya Nguyen, y continúa: "Todo ayuda, tanto si eliges la actividad física como si te aseguras de estar rodeado de un apoyo social positivo". De hecho, en los últimos meses un gran estudio confirmó que se puede morir de soledad.