Entrevista
«El dolor en el pecho se puede irradiar a brazos, espalda o mandíbula»
"Las oclusiones coronarias son las lesiones más complejas de tratar y suponen un reto", afirma a la sección "10 preguntas" la doctora Soledad Ojeda, jefa de Servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Córdoba
1. ¿Qué es una oclusión coronaria crónica? ¿Y por qué tiene que durar mínimo tres meses?
La oclusión coronaria es la obstrucción completa, del 100%, de una arteria coronaria, que son las encargadas de llevar sangre al músculo cardíaco. Se considera que es crónica cuando lleva más de tres meses totalmente cerrada para diferenciarlas de las agudas o subagudas que generalmente tienen menos fibrosis y calcio y, por tanto, son más fáciles de recanalizar con técnicas intervencionistas.
2. ¿Y la triple? ¿Cuántas arterias principales llevan sangre al corazón, pensaba que eran dos?
Normalmente, hay tres arterias principales que irrigan el corazón: la coronaria izquierda, que se divide en dos arterias importantes (descendente anterior y circunfleja), y la coronaria derecha. En pacientes que presentan enfermedad de las arterias coronarias, la oclusión de una de ellas aparece en el 18-20%, aunque esto puede variar según el estudio consultado. La oclusión de las tres principales arterias del corazón es lógicamente mucho menos frecuente y refleja una enfermedad coronaria más severa y avanzada.
3. ¿Qué lo causa?
La causa más habitual es la arteriosclerosis, es decir, la formación de placas de colesterol, grasa, células inflamatorias y otros materiales en la pared de la arteria que, progresivamente, va estrechando la luz del vaso hasta que lo cierra por completo. Otras veces ocurre por la formación de un trombo sobre una placa de ateroma que cierra de forma aguda la arteria y que no se soluciona en esta fase inicial. Actualmente, este mecanismo es menos habitual, ya que las redes de atención al infarto agudo de miocardio permiten tratar a la gran mayoría de estos pacientes de una manera muy precoz, evitando que la arteria permanezca ocluida.
4. ¿Se puede prevenir?
La mejor manera de prevenirla es adoptando hábitos de vida saludables (dieta sana, ejercicio físico y evitar el tabaco) y controlando los factores de riesgo cardiovascular (control de la hipertensión arterial, diabetes y colesterol).
5. ¿Qué síntomas da?
El más común es la angina de pecho, es decir, dolor en el pecho que se puede irradiar a brazos, espalda o mandíbula, desencadenado con el esfuerzo y que mejora y desaparece con el reposo. Este síntoma no es otra cosa que la «queja» de las células que componen el músculo del corazón al no llegarle el suficiente aporte de oxígeno y nutrientes cuando precisan contraerse de forma más fuerte durante un esfuerzo físico.
6. ¿Hay diferencia entre la oclusión y la triple oclusión?
Cuando una arteria está ocluida crónicamente, se desarrollan colaterales para llevar sangre a ese territorio afectado, pero esta sangre aportada por las colaterales suele ser insuficiente en el esfuerzo y por eso los síntomas aparecen típicamente al caminar o hacer ejercicio. También puede causar disnea o sensación de falta de aire y otros síntomas de insuficiencia cardíaca cuando la función de bomba del corazón se ve afectada por la falta de riego sanguíneo. La oclusión de tres vasos indica una enfermedad coronaria más severa y los pacientes suelen tener más síntomas, más deterioro de la función del corazón y mayor limitación para realizar las actividades diarias.
7. ¿Qué pruebas lo detectan?
En la mayoría de las ocasiones los pacientes manifiestan síntomas, por lo que es fundamental que consulte con un especialista o un médico de medicina general que comience el estudio. Dentro del arsenal de pruebas, existen pruebas como un simple electrocardiograma y una ecocardiografía que nos pueden hacer sospechar de la existencia de enfermedad coronaria. Para confirmarla tenemos la opción de realizar pruebas como el TAC coronario, que permite visualizar el árbol coronario de una forma no invasiva, y cuando la sospecha clínica es muy alta o cuando en pruebas no invasivas se detectan claros signos de enfermedad coronaria, la prueba definitiva para su diagnóstico es el cateterismo cardíaco. Sin embargo, la búsqueda activa de enfermedad coronaria a través de pruebas como el TAC coronario solo se recomienda en pacientes con clínica sugestiva de enfermedad coronaria o en pacientes concretos con alta sospecha de enfermedad coronaria, pero no de forma rutinaria.
8. ¿Qué tratamientos existen?
El primer escalón del tratamiento es el farmacológico, es decir, pastillas para controlar los síntomas y evitar la progresión de la enfermedad. Si a pesar del tratamiento el paciente continúa con síntomas o si el área irrigada por la arteria ocluida es importante y puede mejorar su contractilidad si recuperamos el flujo, entonces hay que plantear revascularizar la arteria. Esta revascularización puede realizarse mediante cirugía (by-pass aortocoronario) o de forma percutánea (implante de stent).
9. ¿En qué porcentaje de casos hay que pasar por quirófano?
La decisión entre cirugía o tratar mediante un cateterismo debe ser una decisión individualizada según la extensión y severidad de la enfermedad coronaria en el resto de los vasos, las características clínicas del paciente y la experiencia del equipo en estas técnicas de revascularización.
10. El Hospital Quirónsalud Córdoba dispone de un programa de tratamiento específico para estas lesiones. ¿En qué consiste?
El tratamiento percutáneo de este tipo de lesiones coronarias, la oclusión crónica total, supone un auténtico reto para el cardiólogo intervencionista, siendo las lesiones más complejas de tratar y en las que las probabilidades de éxito son más bajas. Se requiere una formación específica, conocer las técnicas, desarrollar habilidades específicas y disponer de material para recanalizar estas lesiones. Nuestra dilatada experiencia en este campo nos ha permitido desarrollar este programa, contando con la preparación y los medios necesarios para ofrecer este tratamiento a nuestros pacientes con alta probabilidad de éxito de la intervención.