Opinión

Izquierda y PP buscan modelo sanitario al que agarrarse

Ni el PSOE y Sumar por un lado ni el PP por otro están llamados a protagonizar grandes gestas sanitarias

La ministra de Sanidad, Mónica García, a su llegada a una rueda de prensa tras el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), en el Ministerio de Sanidad, a 9 de febrero de 2024, en Madrid (España). El Ministerio de Sanidad y las CCAA se han reunido para abordar la gestión de profesionales en Atención Primaria (AP), entre otras cuestiones relacionadas con este nivel asistencial. A nivel general, durante el encuentro se ha procedido a una evaluación de las acciones del Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria 2022-2023 y futuros pasos a tomar. 09 FEBRERO 2024;MADRID;SANIDAD;CCAA;CISNS;GESTION DE PROFESIONALES;ATENCION PRIMARIA Gabriel Luengas / Europa Press 09/02/2024
La ministra de Sanidad, Mónica GarcíaGabriel Luengas Europa Press

Transcurridos ya unos meses desde las elecciones autonómicas y generales, parece claro que ni el PSOE y Sumar por un lado ni el PP por otro están llamados a protagonizar grandes gestas sanitarias. Los primeros, instalados en el Gobierno, viven en un bucle en el que los ataques a la Sanidad privada y a Muface se suceden como clichés interminables. ¿Cuál es el modelo sanitario de la izquierda? ¿El que basa la defensa de la Sanidad pública en un Estatuto Marco que ha perpetuado el modelo funcionarial entre los profesionales y que cercena sus posibilidades de progresar y de ganar más dinero a cambio de un mayor esfuerzo? ¿El que ataca los conciertos pese a ser un recurso recurrente de las autonomías en las que ha gobernado, como pasaba en Andalucía? ¿El que sataniza a los laboratorios mientras les indulta la aportación que venían realizando anualmente?

Tampoco la oposición de derechas parece en mejor disposición que sus rivales. Porque, puestos a preguntar, cabe también hacerlo sobre el modelo sanitario del PP. ¿Lo es el que impulsaba el Modelo Alcira o el que ha facilitado las reversiones de los hospitales gestionados de forma privada, como este último, al sistema público puro? ¿Es su modelo el que permite la prescripción de marcas de fármacos a cambio de aportaciones de la industria a las arcas públicas o el que busca dispensar genéricos para recabar ahorros? ¿Es el que rechaza el nuevo plan antitabaco por sus defectos o el que lo apoya 24 horas después de criticarlo, como hicieron las autonomías populares en el último Interterritorial?

De momento, estas últimas apenas han logrado coger en un renuncio a la ministraMónica García, sus vacaciones navideñas en pleno pico de gripe, lo que no habla bien de su labor opositora.