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Alimentación

¿Es mejor hacer cinco comidas al día o ayuno intermitente?

Cada vez más expertos defienden el beneficio de ampliar las horas de ayuno, mientras otros avalan el picoteo saludable

Un lácteo con frutos secos es un buen picoteo FREEPIKLA RAZÓN

La idea de que realizar cinco comidas al día es lo más beneficioso para la salud está en desuso y el ayuno intermitente gana terreno, convirtiéndose en una estrategia de alimentación cada vez más extendida. Y en medio de todo ello, el desconcierto de quienes quieren aprovechar septiembre para consolidar buenos hábitos y ganar salud, de ahí que la pregunta del millón sea si realizar cinco comidas al día o dejar a nuestro organismo descansar durante periodos más prolongados.

«En unos años hemos pasado de escuchar que lo ideal es realizar cinco comidas al día o comer cada dos horas, al extremo de realizar ayunos o minimizar el número de ingestas. Desde mis conocimientos y la experiencia, siempre he apoyado que no hay una única opción que sea la más saludable ni la mejor para todo el mundo. Siempre hay que individualizar, no sólo teniendo en cuenta la situación fisiopatológica de la persona, sino también atendiendo a gustos personales, horarios laborales, adherencia, etc. No se puede realizar la misma recomendación para un adolescente que para una embarazada con diabetes o un enfermero que trabaje a turnos. Lo más saludable siempre será la alimentación que cubra los requerimientos y además permita disfrutar de ella y tener adherencia a la misma manteniendo la salud; entre otros motivos, porque no existe un consenso al respecto», reconoce Mónica Pérez, presidenta de la Asociación Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Extremadura y miembro del Consejo General de colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas.

La investigación sobre los posibles beneficios del ayuno intermitente no cesan. Ahora, un estudio liderado por el endocrinólogo Francisco Tinahones, junto a la doctora Isabel Moreno-Indias y el equipo del Ibima Plataforma Bionand, publicado en la revista científica «Gut», revela que esta práctica logra mejoras significativas en la memoria y la velocidad de reacciónen pacientes con obesidad, además de pérdida de peso.

Según algunos estudios, comer cada pocas horas dispara los niveles de insulina y los picos de glucosa, pero no todo es blanco o negro. «Es cierto que cuando realizamos una ingesta, se elevan los niveles de insulina y glucosa, sobre todo cuando la comida es rica en hidratos de carbono. Pero esa elevación también dependerá del contenido de otros nutrientes, como proteínas y grasas, que influyen en el índice glucémico y la respuesta de la insulina. Aunque analizado de manera aislada se pueda llegar a pensar que este hecho se relaciona con aumento de la grasa corporal, hay que tener en cuenta el consumo calórico total y el origen de esas calorías ingeridas», advierte Pérez, quien insiste en que «algunos estudios indican que disminuir el número de comidas parece mejorar ligeramente la sensibilidad a la insulina y la glucosa, aunque en cuestión de cifras de peso y salud no existan tantas diferencias, ya que, por otro lado, hacer mayor número de ingestas al día se relaciona con mejor control del apetito».

Tentempié saludable

Comer algo entre las principales comidas del día no tiene que ser un pecado siempre y cuando se opte por productos saludables y por ultraprocesados rápidos y cargados de sal y azúcar. En este sentido, «tanto para un tentempié como para una comida principal, la mejor opción siempre serán los alimentos de origen vegetal, cargados de nutrientes y fibra y menos calóricos, teniendo en cuenta también que se trata de un complemento más y no sustituye a una comida», aconseja Pérez, quien hace hincapié en la importancia de «evitar procesados y optar por elaborarlos en casa, controlar las cantidades y acompañarlos de agua como mejor bebida». Opciones saludables y fáciles de llevar son una pieza de fruta o macedonia, frutos secos crudos sin sal, encurtidos (aportan prebióticos y probióticos y mejoran la flora intestinal y la salud digestiva), bastones de zanahoria, tomates cherry, hummus o requesón con crudités, triángulos de pan integral con aguacate y queso fresco, etc.