El orgullo de poder vivir el VIH sin estigma ni complejos

Este miércoles 28 de junio ha sido el Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+, una fecha que se acompaña de toda una semana de celebraciones, que hoy terminan, y con las que se busca conmemorar los derechos logrados por estos colectivos. El objetivo de este evento es celebrar públicamente la consecución de esos derechos, visibilizar la diversidad y reclamar la igualdad de derechos de lesbianas, gais, trans, bisexuales, intersexuales y más.

Como parte de esas celebraciones y de esos derechos ganados, hoy en día es posible que las personas con VIH, a pesar del estigma existente, puedan hacer visible que viven con el virus. Es parte de esos derechos ganados, poder hacerlo visible y sin complejos.

Reivindicaciones que el Orgullo LGTBI+ muestra estos días, destinadas a visibilizar a colectivos que sufren estigma y discriminación, además, también, de mostrar nuevos movimientos como Pride Positivo que tiene como objetivo dignificar a las personas con VIH.

Y es que, entre los derechos logrados que se han celebrado estos días se incluyen los vinculados a la salud. Ejemplo de ello son las respuestas que la medicina ha dado hasta la fecha a los pacientes con VIH, demostrando como la innovación, la ciencia y la tecnología han dado respuesta a esta infección.

Pero, aunque en el aspecto estrictamente médico esta enfermedad ha sufrido un cambio de 180 grados desde su aparición, hace ya más de tres décadas, en el campo de lo social queda aún un largo camino por recorrer.

Así lo refleja, por ejemplo, el estudio «Creencias y actitudes de la población española hacia las personas con VIH», realizado por Cesida en colaboración con la Sociedad Española Interdisciplinaria del Sida (Seisida), según el cual un 10% de los encuestados no mantendría «ninguna relación» con una persona con VIH.

Siguiendo con la misma fuente, un 36,3% de la población española se sentiría «incómoda» si un compañero de su hijo tuviera VIH y hasta un 8% sigue apoyando medidas de segregación para este colectivo. Y no solo eso, todavía persisten creencias erróneas sobre su transmisión, dado que un 11% piensa que compartir un vaso puede contagiar el VIH y un 21,3%, que se puede transmitir por la picadura de un mosquito.

Es por todo ello que Gilead, una compañía comprometida con el VIH desde hace 35 años, tiene entre sus objetivos acompañar a los pacientes con esta enfermedad así como apoyar el Pride 2023 mediante distintas iniciativas para seguir aportando mejoras a la vida de estas personas.