Alimentación

Revelan los riesgos para la salud de seguir una dieta vegana en el embarazo

Científicos afirman que el menú vegano puede ser saludable durante el embarazo, pero debe planificarse bien para evitar la preeclampsia

Estrías y celulitis son las grandes temidas, a pesar de ser procesos totalmente naturales en nuestra piel.
Implicaciones y riesgos de seguir una dieta vegana en el embarazoObjetivo BienestarLa Razón

La preeclampsia conlleva riesgos para la madre y para el feto. "Hay formas leves en las que solo detectamos la hipertensión y la proteinuria (presencia anormal de proteínas en la orina) sin más complicaciones", explica Gemma Sesmilo, jefa de servicio de Endocrinología del Hospital Universitario Dexeus de Barcelona, en una entrevista para LA RAZÓN. Pero hay ocasiones más graves.

Estos cuadros se presentan "con insuficiencia renal, alteración hepática, clínica neurológica, hemorragias"; también aumenta el riesgo de desprendimiento de placenta y prematuridad. Los cuadros muy graves pueden llegar incluso a un "desenlace incluso fatal para la madre y el feto", señala Sesmilo. Las causas y los factores de riesgo de la preeclampsia comprenden la edad de la madre (más de 40 años), su IMC, si tiene diabetes, hipertensión arterial crónica o enfermedades renales, entre otras.

Estudios anteriores parecen confirmar que lo que se come también influye en la aparición de esta dolencia. Así, por ejemplo, afirman que la dieta mediterránea se asocia a un menor riesgo, por sus beneficios antioxidantes, a priori ventajosos en un trastorno oxidativo como es la preeclampsia.

Ahora, un nuevo estudio indica que puede darse otro factor que amplifique la probabilidad de desarrollar preeclampsia: la dieta vegana. El nuevo trabajo apunta a que las mujeres que siguen dietas veganas durante el embarazo podrían tener un mayor riesgo de desarrollar preeclampsia y de dar a luz a recién nacidos con un peso inferior. Es el resultado alcanzado a través de un análisis observacional publicado en Acta Obstetricia et Gynecologica Scandinavica.

En la investigación, más de 65.000 mujeres se identificaron como omnívoras, más de 800 como vegetarianas –en alguna de sus diferentes modalidades– y 18 como veganas. Los recién nacidos de madres que siguieron una dieta vegana pesaron de media 240 gramos menos que los bebés nacidos de madres que siguieron una dieta omnívora en el embarazo.

Un estudio fascinante, pero con limitaciones

"Observamos un menor peso medio al nacer entre las pocas madres que siguieron una dieta vegana durante el embarazo en comparación con las madres omnívoras. Reconocemos que encontrar una asociación en un estudio observacional no puede llevar a conclusiones sobre la causalidad. Pero futuros estudios deberían hacer más hincapié en la caracterización de la dieta entre las que se adhieren a dietas veganas y otras formas de dietas basadas en plantas durante el embarazo", escribieron los autores del estudio.

Los autores señalan que sus conclusiones deben interpretarse con cautela, debido a algunas de las limitaciones del estudio. Los investigadores examinaron los datos de más de 66.000 embarazos en Dinamarca entre 1996 y 2002, pero más del 98% de las madres se consideraban omnívoras y comían tanto alimentos vegetales como carne. Solo alrededor del 1% eran vegetarianas y también comían pescado y aves, mientras que el 0,3% eran lacto-ovovegetarianas y no comían carne, pero sí lácteos y huevos. Es decir, que solo el 0,03% eran veganas.

La ingesta de proteínas fue más baja entre los veganos y la ingesta de macronutrientes también fue notablemente inferior. "El número de embarazos veganos fue extremadamente bajo (0,03%; 18 mujeres) en relación con el tamaño total de la muestra. Además, ser vegana cuando se reclutó a la cohorte en 1996-2002 puede reflejar hábitos diferentes en comparación con quienes siguen dietas veganas en la época actual", escribieron.

Lauri Wright, presidente de la Academia de Nutrición y Dietética que no participó en el análisis, afirma para la revista Medical News Today, que los resultados del estudio sobre la preeclampsia son sorprendentes. "La preeclampsia se asocia a menudo con un aumento excesivo de peso, una mayor ingesta de grasas saturadas y una ingesta inadecuada de ciertas vitaminas y minerales como el calcio y el magnesio, factores que no están asociados con una dieta vegana".

La ciencia debate sobre si es bueno o no que los niños sigan una dieta vegana
La ciencia debate sobre si es bueno o no que los niños sigan una dieta veganalarazonPixabay

"Una dieta vegana puede ser saludable durante el embarazo, pero hay que planificarla bien", añade. "Hay algunos nutrientes que aumentan durante el embarazo y que son más difíciles de obtener con una dieta vegana. Entre ellos están las proteínas, la vitamina B12 y el zinc. Las necesidades proteínicas pueden satisfacerse concentrándose en proteínas vegetales como las lentejas y las alubias".

En su opinión, "la dieta vegana tiene muchas ventajas durante el embarazo. Una dieta vegana suele ser rica en frutas, verduras y cereales integrales, que aportan vitaminas, minerales y fibra esenciales. Como resultado, las investigaciones demuestran que las mujeres que siguen una dieta vegana tienen menos diabetes gestacional y defectos del tubo neural".

Es posible seguir una dieta vegana en el embarazo, pero bien planificada

Duane Mellor, dietista registrado y profesor sénior de la facultad de Medicina de la Universidad de Aston (Reino Unido), que no participó en el estudio, afirma que "puede ser más difícil seguir una dieta vegana y asegurarse de que esta sea nutricionalmente completa, ya que puede haber riesgos de ingestas más bajas de hierro, yodo y vitaminas B12 y D, lo que puede afectar tanto a la salud de la madre como al desarrollo del bebé".

El dietista, en declaraciones a Science Media Centre Reino Unido, añade que el estudio incluyó un "número muy pequeño de veganas", lo que "significa que existe riesgo de error estadístico y eso podría explicar las tasas más altas de preeclampsia informadas en veganos". Dado que solo hubo 2 mujeres que presentaron preeclampsia y eran veganas, podría deberse a la variabilidad y al azar.

En cualquier caso, él recomienda que "al planificar un embarazo y durante este, sea cual sea su patrón y preferencias dietéticas, es fundamental seguir una dieta variada y equilibrada, incluyendo suplementos según lo aconsejen las pautas gubernamentales y de salud. Si una dieta es equilibrada e incluye los nutrientes necesarios, incluyendo proteínas, vitaminas y minerales, el tipo de dieta no es tan importante", concluye.

Por su parte, la doctora Dana Hunnes es dietista clínica senior de UCLA Health, en California, declaró a Medical News Today que "la calidad de una dieta vegana puede variar bastante". Y dice que "alguien puede comer una dieta vegana que es altamente procesada o comer una dieta vegana rica en alimentos integrales y extremadamente saludable".

Ella siguió una dieta vegana durante su embarazo y afirma que "puede ser una forma saludable de alimentarse si se hace correctamente". Sin embargo, "yo recomendaría la ayuda de un dietista que pueda ayudar a planificar un menú vegano saludable a base de alimentos integrales para alimentar adecuadamente a la madre y al feto en crecimiento".