Día Mundial del Cáncer de Vejiga

La sencilla prueba para detectar de forma precoz el cáncer de vejiga

La presencia de sangre en la orina o el dolor al miccionar suelen ser los primeros síntomas de la enfermedad

Análisis de orina en la detección del cáncer de vejiga
Análisis de orina en la detección del cáncer de vejigaDREAMSTIMELA RAZÓN

El de vejiga es uno de los tipos de cáncer más frecuentes. Tanto es así que ocupa el quinto lugar entre los tumores más diagnosticado en nuestro país en 2024, según los datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), con 22.097 nuevos casos.

Con una incidencia que afecta predominantemente a hombres, el perfil del paciente suele ser el de un varón con una edad media de 70 años (aunque se registran casos desde los 45 a 54 años, la mayoría se diagnostican entre los 65-75 años).

Como en todas las neoplasias –aunque esto se podría extrapolar a todo tipo de patologías– la detección temprana es fundamental, siendo la hematuria uno de los síntomas más frecuentes y tempranos.

Por eso, prestar atención a la presencia de sangre en la orina y a otros síntomas, como dolor al orinar, incontinencia o necesidad frecuente de miccionar, pueden ser clave para un diagnóstico precoz. Además, los tratamientos varían según el estadio de la enfermedad, por lo que la detección temprana mejora significativamente las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes. La buena noticia es que ese diagnóstico precoz se puede realizar mediante un sencillo análisis de orina.

Por ello, y con motivo del Día Mundial de la enfermedad, que se celebra hoy, 5 de mayo, recordar que uno de los síntomas más claros de este cáncer es la hematuria, presencia de sangre en la orina pudiendo resultar esta de color rojo, marrón, naranja o rosa. A menudo, eso puede ser el primer indicio de la patología.

Pero no es el único, y otros de los síntomas del cáncer de vejiga clave en su detección precoz, y que pueden dar pistas de que algo no va bien (además de la presencia de sangre en la orina), son una alta frecuencia urinaria; la urgencia urinaria; sentir dolor al orinar o también si se tiene dolor pélvico o lumbar.

Hábitos de vida

También hay que poner en valor la importancia de seguir unos hábitos de vida saludables en la prevención de esta enfermedad. Así, algunos cambios vitales en nuestro estilo de vida pueden reducir de forma significativa el riesgo de desarrollar cáncer de vejiga.

Entre ellos destaca de forma fundamental el hecho de dejar de fumar. Y es que, aunque no es muy conocido el dato, el tabaquismo es el principal factor de riesgo, siendo responsable de aproximadamente el 50% de los casos de este tipo de tumor. Esto sucede porque los carcinógenos presentes en el humo del tabaco se filtran a través de la sangre y permanecen en la vejiga, donde pueden dañar el revestimiento celular.

Otro hábito importante es mantener una actividad física regular: el ejercicio no solo mejora la salud general, sino que también puede disminuir la probabilidad de cáncer de vejiga hasta en un 30%. Esto es así porque la actividad física ayuda a mantener una vida saludable y mejora la función inmune.

Por último, pero no menos importante, llevar una dieta equilibrada: una dieta rica en frutas y verduras ayuda a reducir el riesgo de su aparición ya que estos alimentos contienen antioxidantes y nutrientes que protegen las células del cuerpo.