Oftalmología
Este es el único caso en el que los ejercicios oculares están recomendados
Es común que se nos recomienden estos ejercicios para prevenir y corregir problemas oculares como la miopía, la hipermetropía o la presbicia. Pero, ¿son realmente efectivos?
Es bastante común encontrar posts en las redes sociales recomendando practicar ejercicios oculares con el fin de ejercitar los músculos oculares y prevenir o incluso corregir diversos problemas de visión. Se afirma que ejercicios como repetir movimientos con los ojos o enfocar a diferentes distancias varias veces al día pueden fortalecer los músculos oculares, mejorar la coordinación y flexibilidad del ojo, y en algunos casos, eliminar la necesidad de usar gafas o lentillas.
Al ver esto, muchos usuarios de las plataformas se plantean hasta qué punto esto es cierto y forzar la mirada puede tener consecuencias positivas para la salud visual e incluso solucionar problemas preexistentes de visión. Si quieres saber más, continúa leyendo:
¿Evitar el uso de gafas?
En el año 2014, al observar cómo proliferaban los posts, los comentarios y los contenidos que los creadores publicaban recomendando ejercicios oculares para mejorar la salud visual, desde la Academia Americana de Oftalmología o AAO advirtieron que estas aseveraciones que prometían corregir afecciones visuales no tenían ningún respaldo científico.
Desde el organismo explicaron que no existen evidencias científicas que respalden la idea de que el ejercicio muscular pueda mejorar o corregir errores de refracción, que son defectos en la manera en que el ojo enfoca la luz, lo que resulta en una visión borrosa como es el caso de la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo.
Tampoco se han encontrado evidencias de que los ejercicios oculares puedan corregir la presbicia, más conocida como vista cansada, que es la disminución de la capacidad del ojo para enfocar objetos cercanos, lo que dificulta actividades cotidianas como la lectura o el uso de dispositivos electrónicos. De hecho, la mayoría de los adultos desarrollarán presbicia antes o después y necesitarán utilizar algún tipo de corrección óptica... por muchos ejercicios oculares que realicen.
El único caso en el que los ejercicios oculares pueden ser de utilidad, según explica el Instituto Catalán de la Retina en su página web, es en el tratamiento de la insuficiencia de convergencia, un trastorno en el cual los ojos no trabajan juntos cuando se enfocan en un objeto cercano. Esto puede causar visión doble o dificultades para leer y realizar otras tareas de cerca. Para tratar esta condición, se utilizan ejercicios terapéuticos específicos que ayudan a fortalecer los músculos oculares y mejorar la coordinación.
Entre los ejercicios más comunes se incluyen el enfoque alternado en objetos cercanos y lejanos, el uso de tarjetas de estimulación visual y otros ejercicios prescritos por un especialista en salud visual. Estos ejercicios tienen como objetivo mejorar la capacidad de los ojos para trabajar juntos de manera efectiva.
Para cualquier consulta o inquietud acerca de los tratamientos destinados a corregir errores de refracción, es muy recomendable acudir a un especialista. Este profesional determinará el tratamiento más adecuado para cada caso, tras evaluar detenidamente los antecedentes del paciente y realizar un examen exhaustivo de sus ojos.
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