Diez muertos por el derrumbamiento de un hotel utilizado como cuarentena para pacientes de coronavirus en China

El Hotel Xinjia, ubicado en la ciudad de Quanzhou, provincia de Fujian, en el este del país, había sido acondicionado para poder ser utilizado como centro de atención y cuidado para personas que habían tenido contacto con enfermos de covid-19. Desgraciadamente este hospital improvisado se vino abajo durante la noche de ayer dejando un saldo de diez muertos y más de 70 personas atrapadas en su interior, según informa el Ministerio de Emergencias chino. Por el momento, 48 personas han podido ser rescatadas de entre los restos, muchos de ellas gravemente heridas.

Entre las personas rescatadas está un niño de dos años que tuvo que ser auxiliado por los bomberos, al igual que sus padres, y enviado al hospital. Unos 200 bomberos de la ciudad y otros 800 de la provincia de Fujian, además de varios perros de rescate, han sido enviados para llevar a cabo las tareas de búsqueda.

El edificio apenas llegaba a los dos años de vida, se había construido en el 2018, y contaba con unas 80 habitaciones, habilitadas para tratar a pacientes afectados por el coronavirus cuando este se originó. Era una de los dos centros habilitados por el gobierno chino en Quanzhou hasta el derrumbe.

Por el momento se desconocen los motivos por los que ha colapsado el edificio, aunque ha ocurrido cuando se estaba llevando a cabo un proceso de decoración. Pocos minutos antes del accidente, se había avisado de que uno de los pilares de la planta baja estaba deformado, así lo ha dicho el responsable de la Oficina de Construcción y Vivienda de Quanzhou, Zhang Yi.

Se pone así fin a la racha de buenas noticias que China tenía respecto al coronavirus, con más de 3.000 muertos y 80.000 afectados en solo tres meses, ya que la Comisión Nacional de Sanidad había anunciado que el numero de contagios se había reducido.