Extremadura lideró el motín en defensa del vino

El futuro del vino y la cerveza en los menús acaparó gran parte de la reunión del Pleno del Consejo Interterritorial de Salud que se celebró el 27 de abril. Aunque en el orden del día figuraban aspectos clave como la situación epidemiológica de la Covid-19, ya en alza tras la Semana Santa; la vacunación, con la cuarta dosis en ese momento en el aire, y el análisis de las medidas para reducir la temporalidad en la Sanidad, la Estrategia de Salud Cardiovascular y el destino del alcohol en la dieta mediterránea centraron las conversaciones de los consejeros.

Como se recordará, el texto inicial del documento, adelantado por LA RAZÓN, desató un tsunami de informaciones periodísticas esa misma mañana, que llevaron al Ministerio de Sanidad a lanzar en público un desmentido. Sanidad abogaba en concreto en el polémico punto 1.14 de la estrategia, en la página 49, por «colaborar con establecimientos de restauración para promover la dieta mediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable, sin incluir en ella el consumo de alcohol».

Previamente, en el punto 1.12, hablaba de «regular la obligación de los restaurantes de ofrecer agua del grifo por defecto en los menús», y en el punto 1.13 exponía la necesidad de «regular la presencia y contenido de alimentos y bebidas en las cafeterías y máquinas expendedoras de las instituciones de la administración pública y todos los centros educativos, públicos o privados, de forma que mayoritariamente se oferten productos saludables y bebidas libres de alcohol».

En sus ediciones impresa y digital, LA RAZÓN titulaba que «Sanidad promoverá el fin del alcohol en el menú de los bares». Al poco tiempo, otros medios hablaban ya directamente de prohibición. Sanidad salió al paso asegurando que «la estrategia establece recomendaciones de hábitos saludables y no contempla prohibiciones de ningún tipo. Por tanto, es falso que se vaya a eliminar de los menús del día bebidas como el vino o la cerveza». Sin embargo, las explicaciones del departamento de Carolina Darias no terminaron de convencer del todo a los consejeros de Salud de las autonomías presentes en la reunión.

Aunque la mayoría felicitó a Sanidad por la calidad técnica del trabajo en aras de prevenir las enfermedades cardiovasculares en España, algunos pidieron que se eliminara toda la alusión al alcohol. Según revela el acta de la reunión de ese día que ha elaborado el Ministerio de Sanidad, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, fue Extremadura, regida por el PSOE, la que lideró la revuelta exigiendo la supresión en el documento.

Tras una intevención en la que agradeció la participación de todos en su redacción durante un proceso que ha llevado dos años, la directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, recordó que la enfermedad cardiovascular es la primera causa de mortalidad y la segunda de hospitalización. Según dijo, la estrategia tiene y ofrece «una oportunidad de conseguir un cambio positivo en la salud cardiovascular de la población, incrementando ese tiempo de vida de buena salud a partir del abordaje integral».

En el turno de intervenciones, País Vasco y Extremadura mostraron en un principio su conformidad con la estrategia, al igual que Asturias y Cantabria. También avaló el documento La Rioja. Esta comunidad agradeció «especialmente las aclaraciones que se han hecho por parte del Ministerio al respecto de esas informaciones intencionadamente falsas que se han vertido y han copado desde el medio día los medios de comunicación, y que pueden hacer tanto daño a comunidades autonónomas en las que la gastronomía y el vino son sectores de actividad importantes». Sanidad reiteró que no se impondrían obligaciones, tras lamentar de nuevo «el daño que hacen estos bulos».

La Comunidad Valenciana también felicitó al Ministerio y mostró su acuerdo con la estrategia, resaltando que el documento ha tenido presente en todo momento una perspectiva de equidad y con especial atención al género. También Aragón, cuya consejera no asistió, se mostró a favor del documento, al igual que Castilla-La Mancha y Aragón, opinión secundada por Navarra.

Sin embargo, Extremadura alteró el ritmo de la reunión. Según el acta, fue la primera región en proponer suprimir del punto 1.14 el inciso «sin incluir en ella el consumo de alcohol», por haber, apuntó, otros muchos productos alimenticios que pueden afectar negativamente a la salud y que, sin embargo, no se mencionan, en alusión a las bebidas azucaradas. Baleares también apoyó el documento, pero Madrid siguió la estela de Extremadura y respaldó apoyar la eliminación del inciso.

También lo hicieron Castilla y León, y Melilla. La presidenta del Interterritorial sometió a votación la propuesta de los asistentes de modificar el punto 1.14 con el fin de que quedara redactado del siguiente modo: «Colaborar con establecimientos de restauración para promover la dieta mediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable».

Según el acta, «votan a favor del cambio propuesto Galicia, La Rioja, Canarias, Extremadura, Baleares, Madrid, Castilla y León y Ceuta, y se manifiesta a favor Castilla-La Mancha». En contra del cambio sólo votaron País Vasco, Asturias, Cantabria, «y se manifiesta en contra Aragón». Por su parte, Navarra se abstiene. Así, la alusión al alcohol quedó anulada.