"Caos" meteorológico

Cientos de pasajeros en tierra en Baleares por el temporal

La lluvia, con más de 100 litros por metro cuadrado en las islas y Cataluña, y las fuertes rachas de viento provocaron el caos. Los expertos apuntan a una nueva DANA para finales de semana

Fuerte oleaje en Es Murtar, Menorca
Fuerte oleaje en Es Murtar, MenorcaDavid Arquimbau SintesAgencia EFE

El fuerte viento y lluvia que azotaron durante el fin de semana Baleares provocaron el caos entre los pasajeros de los más de 119 vuelos que fueron cancelados o desviados el domingo en los tres aeropuertos de las islas –Palma, Ibiza y Menorca–. Así, según informó Aena, en el aeropuerto de Palma fueron desviados 18 vuelos y se cancelaron 56 operaciones (entre salidas y llegadas). En Ibiza hubo 8 desvíos y 27 cancelaciones, y en el aeropuerto de Menorca 3 desvíos y 7 cancelaciones. Los aeropuertos de Baleares tenían previsto operar el último domingo del mes de agosto 1.455 vuelos.

En el mar, hubo que lamentar la colisión de varios barcos en Mallorca e Ibiza, mientras que en tierra la mayoría de incidencias tuvieron que ver con caída de árboles, desprendimientos y obstáculos en la calzada.

Además, más de medio millar de clientes de Baleares continúan hoy sin luz, aunque la previsión de GESA, según ha trasladado el Gobierno balear, era que a lo largo del día se restableciera el servicio a alrededor del 90% de los afectados, informa Ep.

La consejera de Vivienda, Territorio y Movilidad, Marta Vidal, por su parte, ha calificado la jornada del domingo como «complicada» y «caótica» en algunos momentos por la simultaneidad de las incidencias, aunque señaló que lo «más importante» fue que no hubo «que lamentar ninguna pérdida humana».

En el archipiélago balear el temporal dejó rachas de viento de en torno a los 120 kilómetros hora, así como lluvias muy fuertes, con más de 100 litros por metro cuadrado en diferentes zonas, según precisó ayer la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

De este modo, se registraron hasta 123,4 litros por metro cuadrado en 12 horas en Escorca-Son Torrella (Baleares) y se recogieron 105,6 litros en el municipio de Sóller y 92,8 litros en Pollença.

Las circunstancias climatológicas adversas afectaron asimismo a Cataluña, donde intensas lluvias cayeron de forma generalizada, y a la Comunidad Valenciana, donde el viento sopló con fuerza en Fredes (Castellón), con 108,4 kilómetros por hora.

En cuanto a las temperaturas, la novedad es que ninguna estación del país registró máximas por encima de los 40 grados. En la Península, valores superiores a los 33 grados se registraron solo en Andalucía y Murcia.

Como dato curioso, señalar que en el Pirineo se registraron temperaturas mínimas especialmente bajas. Así, se llegó a los cero grados (ºC) en Cap de Vaqueira en el Valle de Arán, y valores muy próximos a la helada se dieron también en Cerler y Astún en Huesca y Port Aine en Lérida. Todas estas estaciones son de montaña.

Por su parte, en la madrugada del lunes, en Cuellar (Segovia) se registró una mínima de 1,6ºC.

Por contraste, se vivió una noche tórridas en Faro de Carboneras (Almería) con 26,1ºC de mínima, y noches tropicales en el litoral mediterráneo de Andalucía y Murcia, Alicante, Ibiza y Mallorca. En Canarias, la noche fue tropical en muchos puntos y San Bartolomé de Tirajana registró una noche tórrida, y llegó a los 25,5ºC grados.

Hoy lunes, cinco comunidades del nordeste de la península y las islas se mantienen en alerta por viento, lluvia y oleaje, con Cataluña y la Comunidad Valenciana en naranja (riesgo importante), por rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora.

En nivel amarillo, con riesgo ligeramente inferior al anterior, se encuentra Aragón, por viento; Baleares, por oleaje y Canarias, donde está previsto que las rachas de viento alcancen los 70 kilómetros por hora.

Esta semana, a caballo entre los meses de agosto y septiembre y en la que comienza el otoño meteorológico, será más fría de lo normal para la época del año en casi todo el país, según Aemet. Se producirá un ascenso térmico durante los primeros días, pero podría volver a refrescar de cara al próximo fin de semana.

Será también una semana lluviosa en el extremo norte peninsular, con precipitaciones que se extenderán a otros puntos del norte y este de la Península y a Baleares. Durante los últimos días de la semana, aún con incertidumbre, es posible que llueva en amplias zonas del país.

No obstante, según apunta Samuel Biener, experto de Meteored, a partir del jueves habrá que prestar atención a un nuevo descuelgue de aire frío en el Atlántico. Según el meteorólogo se producirá un drástico cambio de tiempo, aunque en ese día sólo se registrarán algunos chubascos en el este, Baleares y en el Cantábrico, y las temperaturas aumentarán.

Pero el viernes el aire frío ya estará en las inmediaciones de la Península y podría desgajarse del chorro polar, lo que podría provocar una DANA o «gota fría», por el momento con una evolución errática e incierta.

De cumplirse ese escenario, Biener señala que las lluvias y tormentas podrán ser muy intensas, y localmente torrenciales en algunas zonas del país durante el fin de semana. La depresión tiene visos de ser excepcional por su profundidad y la fecha en la que podría llegar, con un mar Mediterráneo aún muy caliente que ahora suele aumentar de forma notable el potencial de los episodios de precipitaciones.