Nuevos vecinos para la plaza de los frutos

Armando del Río se incorpora al elenco de «Amar es para siempre», que estrena su cuarta temporada en Antena 3.

Llevan tanto tiempo acompañándonos en la sobremesa que parece que son casi de la familia. Sólo falta que inviten al espectador a tomar el café en la barra de El asturiano, ese bar de la ficticia, aunque ya conocida, Plaza de los Frutos que tanto ha vivido, tantas historias guarda y, sobre todo, que mantiene el honor de ser, probablemente, la barra sobre la que más actores han posado sus codos. Esta semana son días de despedidas para algunos actores, porque cierran sus tramas para dar paso a otros intérpretes. Otros están culminando las primeras escenas de la cuarta temporada de «Amar es para siempre», que se estrena el viernes en Antena 3 y que se ha presentado hoy en el FesTVal de Vitoria, desarrollado estos días.

Nuevo giro histórico

Madrid, de 1964. La sombra de la Guerra Civil es cada vez más difusa pero acecha otra que no será menos importante, la Guerra Fría. Tomás Contreras es un ex teniente de la Guardia Civil que en 1944, tras haberse casado, se alistó como voluntario en la División Azul. Cuando llega a la URSS cae preso y pasa 20 años en campos de concentración, hasta que consigue escapar y regresar a España para continuar con su vida...o lo que queda de ella.

Cuando se apagan los focos y la pantalla se vuelve negra, Tomás Contreras es Armando del Río, actor español con una amplia trayectoria tanto en la pequeña como en la gran pantalla. En el cine, el espectador le conocerá por su papel en «Jamón, jamón», y en televisión es recordado por «Compañeros» y «El Comisario». Ahora, aparte de tener el «gran honor y responsabilidad» de protagonizar la primera escena de la nueva temporada de la serie, tal y como ha relatado a LA RAZÓN, confiesa: «Espero que “Amar es para siempre” sea un gran paso en mi carrera. Por aquí han pasado muchos actores y muy buenos, y todos me han hablado muy bien de ella». «Tomás es un personaje que ha sufrido mucho, pero lo que le ha mantenido con vida a lo largo de este tiempo ha sido el deseo de volver a su país y reencontrarse con su mujer», cuenta del Río. Sin embargo, en dos décadas pasan bastantes cosas y lo que Tomás no sabe es que tiene una hija y su esposa, que está molesta con su vuelta, ha rehecho su vida con un afamado doctor que no es ni más ni menos que el cardiólogo de Franco. Un triángulo amoroso que será clave en los próximos capítulos. Pero esta historia no es la única. Otra de las incorporaciones estrella es Lola Herrera, quien interpreta a Emilia, una enfermera discreta que mantendrá un romance con Pelayo, el propietario de El Asturiano.

Ser uno de los nuevos en una serie con semejante trayectoria –recordemos que estuvo siete años en La1 y desde 2013 en Antena 3– puede dar reparo, pero Armando se muestra confiado: «Somos muchos los que entramos, por lo que la responsabilidad es compartida». Y es que Del Río no estará solo. Toni Cantó, Elia Galera (que interpretará a su mujer), la citada Lola Herrera, Ana Polvorosa y Jorge Sanz son los nuevos habitantes de la Plaza de los Frutos, en la que se encontrarán con los ya habituales Anabel Alonso, Manu Baqueiro o José Antonio Sayagués, que seguirán una temporada más amenizando las tardes de Antena 3 y cosechando datos de audiencia tan buenos como los de la última: una media de un 14,6 por ciento de «share» con 1,7 millones de espectadores.

Una apuesta arriesgada

«Amar es para siempre» está arriesgando ahora más que nunca, un gran reto tratándose de una serie diaria. Para esta temporada, además de la incorporación de nuevas caras y tramas, los espectadores asistirán a una remodelación de la Plaza de los Frutos, que a partir de ahora será peatonal. Y en cuanto a la producción, también hay novedades, como nuevos escenarios y más rodaje en exteriores. «Es un gran atrevimiento apostar en una serie diaria por tramas policiacas, de espionaje, suspense y thriller»

Del Río ha aprendido de Tomás «el sufrimiento por el que pasa alguien que soporta situaciones durísimas con tal de volver a su país después de tanto tiempo». Por ahora ha tenido pocas escenas con el elenco de la serie, pero ha trabajado ya con un actor alemán y dos rusos para aquellas en las que Tomás huye del campo de concentración: «Uno de los rusos es hijo de un agente de la KGB, por lo que su experiencia fue muy enriquecedora para mi papel cuando cae en manos de esta organización.¿Perspectivas para esta nueva etapa? Del Río lo tiene claro: «Darle a la audiencia lo que espera de las series de sobremesa».