La contaminación plástica también llega a los testículos: cuál es el riesgo y cómo protegernos

Los microplásticos, fragmentos diminutos de plástico de menos de 5 milímetros, están cada vez más presentes en el medio ambiente y su impacto en la salud humana es motivo de creciente preocupación. Estos contaminantes, que provienen de la degradación de productos plásticos más grandes o de partículas microscópicas utilizadas en cosméticos y productos industriales, han sido detectados en el agua, el aire, los alimentos y también en el cuerpo humano.

Uno de los principales riesgos asociados con los microplásticos es su capacidad para penetrar en nuestros cuerpos a través de la ingesta, inhalación o contacto dérmico. Se estima que un cuerpo humano promedio ingiere entre 39.000 y 52.000 partículas de microplásticos al año.

Estudios han encontrado que estas partículas pueden estar presentes en productos de consumo como mariscos, agua embotellada e incluso en la sal de mesa. Una vez dentro del organismo, los microplásticos se alojan en órganos como pulmones, hígado, riñones o cerebro.

Varios estudios recientes han encontrado por primera vez microplásticos en los testículos y el semen de los hombres.. Estas partículas podrían afectar tanto a la calidad del esperma como a la capacidad reproductiva. Tal y como explica el Dr. de Rocco, andrólogo en la Fertilab Barcelona, los microplásticos pueden actuar como “disruptores endocrinos”, lo que significa que interfieren con el funcionamiento normal de las hormonas produciendo problemas en aspectos como la fertilidad.

Provocan alteraciones hormonales esenciales para la producción del esperma, disminuyendo tanto la calidad como la cantidad del mismo. A largo plazo, esta interferencia puede comprometer la fertilidad masculina, un problema que se ha vuelto más evidente en las últimas décadas, con estudios que señalan una caída significativa en la calidad del esperma a nivel global en los últimos 50 años.

Además de afectar la calidad del esperma, los microplásticos pueden perjudicar otras áreas clave del sistema reproductivo masculino, como los testículos y la próstata, ya que estas partículas tienen capacidad de infiltrarse en los tejidos del cuerpo. Aunque los efectos específicos de esta contaminación en los órganos aún no están completamente definidos, se considera que los hombres con fertilidad subóptima son particularmente vulnerables.

Como protegerse contra la exposición a los microplásticos

Factores como el tabaquismo, el consumo de alcohol, el sobrepeso y el sedentarismo no solo afectan la salud general, sino que también pueden aumentar la vulnerabilidad a los efectos de los microplásticos en el cuerpo. Por ello, adoptar hábitos de vida más saludables es esencial para proteger el sistema reproductivo y reducir los riesgos a este tipo de contaminación.

Entre las medidas preventivas recomendadas, es fundamental:

• Evitar el uso de envases de plástico para almacenar y consumir alimentos, ya que de esta manera los microplástico pueden transferirse fácilmente a los alimentos.
• Filtrar el agua del grifo ayuda a reducir la ingesta de las partículas
• Se sugiere optar por opciones de limpieza ecológica, evitando productos como esponjas,y paños de microfibra, ya que son fuente de microplásticos.
• Reducir el consumo de agua embotellada

“Se necesita más investigación para comprender completamente los efectos de los microplásticos en la salud humana. Mientras tanto, reducir la exposición a través de estas medidas preventivas puede ser beneficioso” , afirma el Dr. de Rocco. Además, el experto recuerda que es crucial realizar revisiones periódicas con un andrólogo para detectar cualquier problema antes de que se presenten síntomas, asegurando así un cuidado preventivo adecuado.