Encuentra a su marido muerto tras mandarle a dormir al sofá

Ashley Murrell, de 33 años, mandó a su marido a dormir al sofá sin saber que sería la última noche que pasaría con él. Mikey Murrell, de 36 años, era limpiador de alfombras y ese día estuvo trabajando 16 horas. Su mujer se enfadó muchísimo con él por llegar tan tarde, hasta tal punto que no le dejó dormir en la habitación. Para sorpresa de su esposa, por la mañana apareció muerto en el sofá donde pasó la noche. La autopsia reveló que Mikey murió ahogado mientras dormía.

La noticia ha conmovido a todo el mundo. Mikey trabajó tanto aquella noche para cobrar horas extras y regalarle un viaje a su mujer por su aniversario. "Todavía me resulta difícil pensar en mis últimas palabras provocadas por la ira. Cuando me enteré de que había estado ahorrando para irnos de viaje de aniversario fue horrible", declara al diario Metro.

La joven todavía recuerda a su marido y el grave error que cometió al regañarle. Ahora, su reacción habría sido totalmente distinta. La británica recomienda que las parejas se besen y solucionen sus problemas antes de dormir. No hay que dejar nada pendiente para mañana si se puede arreglar en el momento. Además, nada es tan importante como el cariño que se siente hacia tu pareja.

Dicen que un clavo saca otro clavo. Y también que el roce hace el cariño. El caso es que Ashley ha encontrado de nuevo el amor. Lo llamativo es que se ha enamorado del hermano de su difunto marido, Chris Murrell. El amor ha surgido entre ambos después del gran apoyo que la viuda recibió de su cuñado.

Un amigo de la pareja ha declarado al Sun online que tanto Chris como Ashley han vivido momentos muy duros y difíciles, pero que ahora están la mar de felices. También afirma que ambos tienen muy presente a Mikey, al que recuerdan cada día.